ENRIQUE VIII: EL REY Y LA CORTE DE LOS TUDOR – Alison Weir
Lo primero que puede llamarnos la atención al acercarnos al libro cuando lo vemos en el estante de una librería es su portada. En ella veremos la figura del actor Jonathan Rhys-Meyers caracterizado como Enrique VIII para la serie televisiva Los Tudor. Así pues, ¿es este libro una guía de la serie? ¿Nos cuenta en que aspectos se aleja y en cuales se acerca a la realidad? ¿Cómo fue el proceso de ambientación y caracterización histórica que se siguió?
Para nada. No es un libro para el público seguidor de la serie de la BBC. O mejor dicho, no para todo el público. Y es que un extenso estudio de más de 700 páginas sobre la figura de Enrique VIII y su Corte se antoja demasiado arduo para el público en general.
Todo queda más claro aun cuando vemos la fecha de publicación del libro en su Inglaterra natal: 2001. Lo que tenemos entre manos es una reedición al calor del éxito de la serie (que comenzó en el año 2007); reedición que ha hecho que el libro llegue a nuestras costas con mucha más fuerza que su casi desconocida edición de 2003. De ahí su portada.
Basta mirar la biografía –y la bibliografía- de la autora para saber que estamos ante una auténtica eminencia en el tema:
«Alison Weir nace en Londres y se educa en el City of London School. Se forma como profesora de historia y comienza su carrera en el Civil Service antes de escribir su primer libro, Britain’s Royal Families, en 1989. Desde entonces ha publicado más de una docena de libros de historia, recibidos siempre con elogios por parte de la crítica y los lectores, entre los que cabe destacar: The Six Wives of Henry VIII, Eleanor of Aquitaine, Mary Queen and the Murder of Lord Darnley. Es también autora de novelas históricas como The Lady Elisabeth y The captive Queen: A Novel of Eleanor of Aquitaine. Ha colaborado con Smithsonian Journeys en Washington, institución para la cual desarrolló un recorrido histórico de los Tudor.»
Calificar a un libro sobre «el definitivo» sobre un personaje histórico es siempre demasiado arriesgado, pero sin duda éste debe estar cerca de merecerlo.
El libro es un completísimo recorrido sobre el reinado de Enrique VIII, arrancando en una primera parte en la que nos describe la corte y los palacios, para luego proseguir con en el reinado de Enrique VIII, siempre desde un punto de vista cronológico. No se deja de lado ningún aspecto digno de análisis: arte, religión, moda, sociedad, pasatiempos, vida cotidiana, guerra… todo recibe su atención –a veces detallada hasta el cansancio—. Nos topamos en ocasiones con largas listas de nombres de nobles, cargos, palacios, etc. que hacen la obra demasiado densa por momentos, lo que, junto al cuantioso número de páginas, puede echar para atrás. Pero una vez se va avanzando no cabe duda de que el libro es sin duda excelente, con un manejo de las fuentes apabullante –y eso que estamos en uno de los reinados con mayor número de ellas- y ante nosotros se desgrana una Corte y una época cuyo boato nunca se había visto en las islas británicas y quizás nunca vuelva a verse. Enrique VIII fue el primer monarca «renacentista» de Inglaterra, con una corte ceremonial y llena de lujos, muy al estilo de la famosa corte de Borgoña que tan magistralmente nos detalló Johan Huizinga en su El otoño de la Edad Media. El libro no se pierde en los pormenores sobre la lujuria del rey, matizada en muchas ocasiones, ya que no era algo demasiado raro para la época. El personaje de Enrique VIII aparece con sus luces y sus sombras, repleto de ambas.
Por lo tanto, es una obra muy recomendable para aquellos a los que un libro de ensayo histórico no les asuste -que a veces peca de farragoso por las ya comentadas largas listas de nombres- y deseen conocer en profundidad cómo se vivía y moría en la corte de uno de los monarcas más poderosos que haya dado Europa.
Título: Enrique VIII: El Rey y la Corte de los Tudor
Editorial: Ariel
Páginas: 710
Año: 2010
[tags]Enrique VIII, rey, corte, Tudor, Alison Weir[/tags]
Pués es una lástima que alejen al público serio con esa portada, y simultaneamente, intenten atraer a un público que no va a encontrar precisamente de su gusto encontrar un estudio serio de ese volumen.
Debieron pensar que los atraidos serían más numerosos que los alejados. Pero lo dicho, un buen libro sobre el tema cuya portada es puro marketing.
Pues yo confieso que la semana pasada me tiré un buen rato en la librería y esquivé con mi poderoso giro de cintura esa portada, pensando que se trataba de otro libro nacido al calor de una serie televisiva.
¡Ostras que susto me he llevado al ver el libro y su portada!… he pensado «¿y ahora qué, un libro sobre la serie de Viriato?» Menos mal que luego la buena reseña me ha demostrado que estaba equivocado. Parece interesante, aunque el fofo Enrique siempre me ha caido mal mal, y más desde que al principio repudió a Catalina de Aragón, pobre ella, una señora preparada para ser reina desde su nacimiento no como las queridas con las que se adornó su desastrado marido.
Me lo apunto Vorimir… y felicidades por la reseña ;-)
Es un personaje curioso este, que nunca ha caído bien ni entre sus propios fieles. Como decían en «Trompetas para Isabel» de Edith Sitwell, Enrique VII fué el causante de las mayores matanzas que jamás ocurrirían en las islas británicas.
Buena reseña, Vorimir, pero por lo que comentas y por el denso contenido del mismo, si la primera edición fun un tanto desconocida y aprovecharon el tirón de la buenísima serie de la BBC, está claro que han querido aprovecharse de la ocasión. Enrique VIII será uno de los reyes más odiados que haya, sobre todo en sus relaciones con España (Catalina de Aragón lo sufrió en sus carnes) y ni qué decir tiene cómo terminaron la mayoría de sus restantes esposas: descabezadas. Más que mirar por el bien de su reino velaba por el suyo propio y hacía y deshacía alianzas a su antojo para conseguir sus propósitos. Un buen «elemento» Enrique VIII. Saludos.
Bueno, sus relaciones con España nunca fueron malas, es importante remarcarlo. Solo a partir de la excomunión de 1533 se convierte sin remedio en un hereje, e incluso desde ese momento sus relaciones con España son frías ( Carlos Iº es sobrino de Catalina) pero correctas.
Y ni eso impidió al César Carlos, defensor de la Cristiandad, aliarse con Enrique VIII para juntos atacar Francia en las llamadas Guerras Italianas de los años 40 del siglo XVI.
No hay que olvidar las jornadas del Campo del Paño de Oro… aun así siempre me cayo mal (siempre me ha dado pena Catalina y lo de la camisa)
Bueno, hay un pequeño problema de cronología: Cuando Enrique VII se alia con Carlos Iº todavía es, formalmente, católico ( Recordemos que la excomunión y el matrimonio con la Bolena son de 1533 y Pavía de 1525 )
En los años 40 hubo una nueva alianza entre el Emperador y Enrique VIII para atacar Francia. De hecho Enrique VIII consideró la conquista de Boulonge como un gran éxito (aunque la guerra agotó el Tesoro Real) suyo, más aun cuando Carlos V tuvo de abandonar su campaña.
Como decía, las relaciones nunca fueron malas ( Maria Tudor siempre sonó como una posible novia para el viudo Carlos Iº, y terminó lográndose la boda española ) y no solo estuvo la alianza de los años 40, hubo otra anterior en los años 30, inmediatamente posterior a la excomunión de Enrique VIII…Pero después de saquear Roma, no estaría Carlos Iº para muchas concrecciones.
En la que mencionas no hubo ningún intento de Carlos Iº de forjarla, sino que se la regaló Enrique VIII, que veía peligrosamente cerca la mano de Francisco Iº sobre Escocia. El mismo rey participó en ella, sin destacar demasiado debido a su edad y salud. Tampoco en esta ocasión estaba Carlos Iº para rechazar el dulce regalo de una alianza de ocasión, puesto que la situación era crítica.
Por ciero que el que abandonó la campaña fué Enrique VIII, que incumplió el pacto de avanzar conjuntamente hacia Paris. Se quedó en la costa, y se retiró después dejándo una exigua guarnición. Fué Carlos Iº el que tuvo que hacer todo el trabajo, y aún después desplegarse en Alemania contra los principes protestantes.
Galaico: «Enrique VIII será uno de los reyes más odiados que haya, sobre todo en sus relaciones con España (Catalina de Aragón lo sufrió en sus carnes) y ni qué decir tiene cómo terminaron la mayoría de sus restantes esposas: descabezadas. Más que mirar por el bien de su reino velaba por el suyo propio y hacía y deshacía alianzas a su antojo para conseguir sus propósitos. Un buen “elemento” Enrique VIII. »
Bueno, más que España, a quien más problemas dio fue a Inglaterra; es probablemente el monarca de su época que más gente llevó al verdugo y a la muerte, más que el propio sultán turco. Muchos historiadores creen que se debía a su sífilis que acabó afectando a su mente.
Aunque no se si en el libro reseñado por Vorimir (buena reseña por cierto, aunque con la portada se han lucido) mencionan el asunto de su enfermedad venérea y como afectó a sus sucesores.
Buena pregunta. ¿Las taras que terminaron con los Tudor procedían de ahí?
Es un gusto y un enorme privilegio saber que existe gente que le apsiona la historia y en especial la vida de Erique VIII como a mi !!, la portada del libro le da la imagen perfecta, pues bien el libro y su contenido son perfectos, ademas los asuntos de estado estaban por encima de cualquier relación sentimental, y aun cuando españa apoyaba a Catalina de Aragon, tarde o temprano tenia que aliarse con Inglaterra primero son los interes politicos Eran Hombres!!
Y estados.
De todas formas 550 años de guerras contra Francia no se olvidan de un día para otro.
Cierto, en la época de Enrique VIII todavían estaban activos los rescoldos de la Guerra de los Cien Años. Es en el siglo XVI cuando cae la última posición inglesa en Francia.
Interesante reseña voromir, la verdad es que ví la portada y no abri el libro pensando que estaba mas centrada en la seie de tv,que no he visto.Por cierto,al darle al enlace de «si quieres compra…» te lleva a una edición descatalogada no a esta.Un saludo
Cuando vi la portada, dudé. Pero hacía tiempo que estaba buscando un buen trabajo sobre Enrique VIII. Lo bueno de la portada es que, al abrir el libro, ésta queda fuera de tu vista quedas deslumbrado por el contenido. Definitivamente, un libro con 37 páginas de Bibliografía, merece la atención de cualquiera.
Coincido con lo pesado que a veces puede resultar la lectura por los nombres, lugares y detalles a granel, pero es verdad: ya dentro de la lectura, esta puede ser ágil y fascinante. ¡Gracias por esta estupenda reseña!
No he podido ver esta serie, peor me apareció como sugerencia después d ever un capítulo de Game of Thrones, en http://www.hbomax.tv/game-of-thrones-5/ le di click y están todos los capítulos. Espero no perderme ninguna de las dos series.