EL LIBRO DE LOS CINCO ANILLOS – Miyamoto Musashi y HAGAKURE – Yamamoto Tsunetomo

«El guerrero pule su corazón y mente, al punto de no caer en la oscuridad de un corazón confundido. También el guerrero ejercita en la vida diaria la vista y la percepción sin que se nublen y cuando el cielo de la incertidumbre se le aclara, ahí está el Vacío verdadero»

Miyamoto Musashi

Si hay dos libros o tratados que pueden ejemplificar la esencia de lo que era el samurái japonés de los siglos XVI y XVII estamos sin duda ante ellos.

El Libro de los Cinco anillos es un tratado de estrategia militar y esgrima escrito por el más famoso samurái de todos los tiempos: Miyamoto Musashi (o Musashi Miyamoto), cuya figura ha sido objeto de diversas obras ya comentadas anteriormente en Hislibris. El Libro de los Cinco Anillos es a la cultura japonesa lo que El Arte de la Guerra de Tsun Tzu a la China: un libro de cabecera para muchos empresarios, hombres de negocios e incluso para el hombre de a pie, lleno de consejos sobre el liderazgo, la disciplina y la preparación ante las dificultades de la vida. Una de sus lecciones más famosas es la que nos dice lo siguiente a la hora de contarnos como encarar un duelo de espada:

Si tu enemigo te ataca, mátalo. Si eres tú el que ataca, mátalo. Si os atacáis a la vez, mátalo.

La victoria como objetivo final, más allá de la propia vida, para no ser derrotado nunca. Y es que Musashi a lo largo de su periplo como samurái errante venció en más de sesenta duelos —muchos de ellos a muerte y contra maestros de dojos de esgrima— y a lo largo de ellos desarrolló un estilo propio llamado Niten Ichi Ryu (cuya traducción podría ser «La escuela de estrategia de los dos cielos gemelos»), cuyo nombre hace mención a una de las grandes innovaciones en el mundo de la esgrima japonesa que Musashi desarrolla: la lucha con las dos espadas al mismo tiempo, la larga (katana) y la corta (wakizashi).

Sin embargo no es un «simple» escrito sobre como empuñar una espada, ya que cabe recordar que las artes marciales eran consideradas al fin y al cabo un arte, algo que podía dominarse y perfeccionarse con la experiencia, la meditación y el entrenamiento. Un famoso proverbio japonés de la época decía que quien dominaba totalmente un arte era capaz de dominarlas todas, ya que para ello se debía alcanzar no sólo la perfección física si no también mental y espiritual.

Musashi, quién en vida no había querido construir un dojo —escuela— a fin de poder seguir viviendo como un peregrino, entregó este tratado a su mejor alumno para que él continuase con sus enseñanzas. Pocos meses después, el más famoso samurái de Japón moría con poco más de sesenta años en la gruta donde se había retirado a meditar y a escribir el libro de su vida, el Libro de los Cinco Anillos.

El Hagakure nos habla de otra parte fundamental en la mentalidad del samurái: el código del bushido —«El camino del guerrero»—, el famoso y férreo código de conducta que llevaba incluso a los guerreros japoneses a abrirse el vientre en la derrota o la vergüenza en el ritual llamado sepukku o harakiri. Debe comentarse aquí que el bushido como algo homogéneo y sistematizado no existía tal cual y no fue hasta casi finales del XIX que se pusieron por escrito una serie de normas comunes para poder hacer entender a los occidentales el alma del pueblo japonés. Esta obra fue llevaba acabo por Inazo Nitobe (1862 – 1933), que presenta quizás una versión endulzada y más caballeresca, más acorde con la mentalidad europea y occidental de la época y más afín a la caballería medieval, un concepto que los extranjeros podían entender; pese a todo, es también una gran lectura, y un libro que podíamos incluir aquí como el tercero en discordia sobre el alma del pueblo japones entre los siglos XVI-XX. Sin embargo, el libro que comentamos no es por lo tanto un tratado estricto sobre el bushido, sino una serie de historias, consejos y fábulas para que sepamos como debe regirse un auténtico samurái ante muchas y diversas situaciones, teniendo muchas de estas historias como protagonistas a famosos samuráis y señores de la guerra de la historia de Japón (el libro fue escrito a comienzos del XVIII), como Tokugawa Ieyasu, el gran unificador de Japón tras las guerras de la época Sengoku (XVI). Yamamoto Tsunetomo (1659-1719 ) escribió su libro en una época en la que los samuráis estaban perdiendo su ética, abandonado las artes marciales y dedicándose al comercio y la política, por lo que su autor trataba así de comparar los hechos y virtudes de hombres del pasado con lo que él consideraba la actual decadencia espiritual de la casta guerrera.

La editorial La Esfera de los Libros posee dos excelentes ediciones de ambos recopilados en un sólo volumen. El primero se titula La vía del samurai, siendo una traducción de la edición japonesa del profesor Hitoshi Oshima, quién por cierto está casado con una española que es a la vez su traductora, y el segundo tiene el nombre de El código del samurái, siendo un recopilatorio de las partes que han sido consideradas más importantes por el propio profesor Hitoshi Oshima junto a una excelente introducción a cargo del catedrático de la Universidad de Sevilla Juan Gil.

Si también queremos acercarnos a la posterior obra de Inazo Nitobe, la editorial Dojo (Madrid) posee una excelente edición de este tratado, un intento de glorificar —y a la vez idealizar— una época ya prácticamente perdida, sobre todo con la abolición de la casta samurái y sus privilegios en 1871.

Es en la obra de Nitobe donde se sistematizan los siete preceptos principales del bushido, tal y como lo conocemos hoy día, y como hemos comentado muy idealizados:

1. Gi (Justicia): Sólo existe lo correcto y lo incorrecto.

2. Yu (Valor): El valiente no sigue los pasos de la estupidez.

3. Jin (Compasión): Si la oportunidad para hacer el bien no surge, se sale de su camino para encontrarla.

4. Rei (Cortesía): Un alma sin respeto es una morada en ruinas.

5. Makoto (Sinceridad): Las palabras de un hombre son como sus huellas; puedes seguirlas donde quiera que él vaya. Decir y hacer es la misma cosa.Cuidado con el camino que sigues.

6. Meiyo (Honor): La muerte no es eterna; el deshonor, sí.

7. Chugo (Lealtad): Un samurái es leal a su señor, y a todos aquellos bajo su cuidado; o no. Para aquellos de los que es responsable, siempre responde con su vida.

Estos libros, muy influidos por el budismo, el shinto —religión tradicional japonesa—, la filosofía Zen y la cultura china —origen de los preceptos del bushido para muchos estudiosos— poseen a la vez una fuerte carga moral, espiritual y práctica, una afirmación que puede sonar contradictoria pero que es uno de los pilares de Japón; y aquí os he traído comentados dos libros (tres si contamos el ensayo de Inazo Nitobe) que forjaron su espíritu como los herreros de antaño forjaban las katanas.

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58 comentarios en “EL LIBRO DE LOS CINCO ANILLOS – Miyamoto Musashi y HAGAKURE – Yamamoto Tsunetomo

  1. Antígono el Tuerto dice:

    Excelente reseña Vorimir, la verdad es que de Musashi y su código samurai fueron tema de un documental emitido por TV hará un años y desde entonces tengo interés por saber más de los samurais y su mundo. El paralelismo con los caballeros medievales es muy usado en casi todos los artículos y documentales sobre el tema, pero al ser producto de dos culturas diferentes habría más diferencias que similitudes.

  2. APV dice:

    Tienes razón en que forjaron ese espíritu, en cierto modo lo crearon, pues aunque Musashi era un verdadero guerrero, Tsunetomo no había visto una guerra en su vida.
    Por tanto ese código que se creó sonaba muy bien para sus tiempos de paz y era la autojustificación de su clase social.

    Pero en realidad un samurai que vivió durante la guerra Genpei, las dos cortes, la guerra Onin o la era Sengoku era más normal, más realista.

  3. Genial! Va link en mi próximo Lo mejor de la quincena

  4. Hagakure dice:

    Bravo Vorimir, lo has bordado; excelente reseña. Libros imprescindibles para el estudio del pensar japones.
    EL LIBRO DE LOS CINCO ANILLOS y HAGAKURE, libros de cabecera para mi, que me ayudaron en mi camino de las artes marciales (herederas del espíritu del Bushido) y también en la práctica del tiro con arco. Me dieron pie a conocer y a estudiar las fuentes de las que bebe; las que has mencionado en el último párrafo más otra que añado: el Taoismo. Un bello universo.

  5. Vorimir dice:

    Gracias a todos. APV, tienes razón, pero Tsunetomo más que crear el código escribió un libro sobré él, sobre el «como ha de portarse un auténtico samurai» o sobre «como se portaban hace un siglo o dos los auténticos samurais», un poco para abofetear en la cara a sus contemporáneos que estaban abandonando la senda del guerrero (el bushido). Aunque es cierto que nunca participó en una guerra y para él era «fácil» hablar de ese código en una época en la que no era tan necesario, Tsunetomo si lo seguía en vida y tras la muerte de su señor no se abrió el estómago pq la última voluntad de su señor pidió expresamente que no lo hiciera.
    Fue más Inazo Nitobe quién escribió el código, ,lo endulzó, lo idealizó… ya a fines del XIX.
    PD: Hagakure tiene razón, no sé como olvidé mencionar el taosimo como una de las influencias chinas del bushido y la filosofía samurai. Aiiis la religión y la cultura japonesa, son tan inabarcables. :D

  6. Es un gran libro que leí hace años, con profundas reflexiones que se pueden extrapolar a otros aspectos de la vida, es una forma de vivir que busca la excelencia de uno mismo. Hace un año pusieron en el Canal Historia una serie documenta sobre Mushashi, su vida, y su legado en el Japón actual, IM-PRE-SIO-NAN-TE.

    Muy,muy recomendable para reflexionar, en esta vida moderna acelerada.

    Un saludo

    1. Javi_LR dice:

      Por poner un poco de picante, y desde el desconocimiento casi absoluto:

      Estos libros, aparte de tener cosas positivas para reflexionar, también tiene una apología a auténticas barbaridades de comportamiento, ¿no?

  7. Vorimir dice:

    Efectiviwonder Javi. Ya sabes, otra época, otra mentalidad…
    Al fin y al cabo Musashi te explicaba como poder matar más rápidamente a tu rival o como luchar sin cuartel, y las historias ejemplarizantes del Hagakure… lo eran desde el punto de vista de un samurai del XVI.
    Por ejemplo, Musashi es un héroe nacional, pero era un tipo que se dedicó a ir por ahí matando a otros samurais en duelos; en uno de ellos mató a un joven samurai, apenas mayor de edad, simplemente pq era uno de los propietarios de un famoso dojo (también mató a su hermano mayor y a unos pocos alumnos que trataron de vengar a sus maestros).

    Es la contradicción del Japón, un mundo frio y cruel rodeado de paz, meditación y armonía. Donde los guerreros decapitaban a sus enemigos o se abrían el vientre, o bien pasaban los días siguientes meditando o realizando la ceremonia del té.
    Por ello son libros para conocer la mentalidad de una época, aunque no debemos olvidar que Japón es un país muy tradicionalista y como en el siglo XX con el imperialismo japonés y la IIGM se retomó todo este ideario del samurai y el bushido hasta darle un nuevo impulso, no ya como la mentalidad y modo de vivir de una casta de la sociedad sino la de todo japonés. Desde entonces cada japonés era considerado un samurai, un sirviente del Emperador y de la nación.

  8. Vorimir dice:

    PD: El libro de Inazo Nitobe si nos presenta una visión mucho más idealizada acorde con la propia visión idealizada y romántica del XIX europeo sobre la caballería medieval.

  9. Vorimir dice:

    @Blas: No recordarás como se llamaba el documental, ¿no?

  10. APV dice:

    No estoy de acuerdo Voromir, ese portarse como un «auténtico samurai» no era tan realista. Tsunetomo recopiló relatos y historias acordes con sus ideas.
    En la Era Tokugawa quedaba bien y era necesario crear ese concepto de clase samurai (hasta el final del S. XVI no se petrificó el acceso y la estratificación social); en ese sentido muchas costumbres si eran anteriores pero el significado no estaba tan ritualizado: decapitaban al enemigo porque esperaban la recompensa y es más sencillo llevar sólo la cabeza; se suicidaban cuando estaban perdidos y para privar del honor al enemigo (después se añadió el ayudante por si fallaba el golpe),… pero todo ese ritual y demás es posterior. Es más un «auténtico samurai» estaba dispuesto a traicionar señor, a cambiar de bando, a huir si la cosa iba mal para combatir otro día,…

    Los samurais que vivieron las etapas de guerras eran más pragmáticos.
    Intentar retrotraer el bushido desarrollado después a ellos es como intentar aplicar el código de caballería de la Edad Media a todos los caballeros y jinetes de esa época o extender el ideal espartano de con el escudo o sobre él a todos los hoplitas (basta ver lo que opinaba Arquiloo).

    Sobre este tema ya hablamos en la reseña del libro los samurais.

  11. Voromir, el documental en 6 episodios se llama «Samurai: Tras la huellas de Musashi», los emitieron en diciembre de 2010.

    Javi, lo que expresa Musashi es el camino de la perfección de las habilidades de uno mismo, en su caso, ser el samurai más eficiente, el que derrota a sus enemigos no sólo con las armas sino con astucia, analizando su psicología, tomando ventajas del entorno que le rodea, dominando el «timing». Un ejemplo de adaptación, de evolución para sacar lo mejor de uno mismo («lo mejor» entiéndase como búsqueda de la perfección, proponerse un objetivo, una meta, y conseguirlo)

    «Para andar mil millas sólo hace falta una cosa: dar un paso y luego otro, y otro, y otro..» (Musashi)

    Un saludo

    1. Javi_LR dice:

      Gracias, Blas. Ya digo que mi desconocimiento del tema es brutal, así que os leo y aprendo un montón.

  12. Antígono el Tuerto dice:

    APV: «Es más un “auténtico samurai” estaba dispuesto a traicionar señor, a cambiar de bando, a huir si la cosa iba mal para combatir otro día,…

    Los samurais que vivieron las etapas de guerras eran más pragmáticos.
    Intentar retrotraer el bushido desarrollado después a ellos es como intentar aplicar el código de caballería de la Edad Media a todos los caballeros y jinetes de esa época o extender el ideal espartano de con el escudo o sobre él a todos los hoplitas (basta ver lo que opinaba Arquiloo).»

    Bueno, me has quitado la palabra de la boca, iba a mencionar precisamente eso; la idealización del samurai y de sus códigos es parecida a la de los caballeros medievales y su código de caballería, aunque mucha gente pueda creer que los caballeros se comportaban como los que salían en las novelas de Walter Scott o en los libros de Amadís, Tirante y sus innumerables imitaciones, lo cierto es que los auténticos caballeros medievales eran más brutales y prágmaticos en el campo de batalla (que no tenía nada que ver con los torneos y su parafernalia), si nos fijamos en las crónicas de Froissart o en las de Pérez de Ayala veremos cientos de ejemplos de nobles caballeros medievales cuya conducta dejaría mucho que desear en cuanto al ideal de caballería.
    Y lo mismo sucede con la idealización del guerrero griego modelo de virtudes guerreras y fiel defensor de su patria hasta la muerte, los casos de ejércitos hoplitas que huyen en masa no son tan escasos, y ejemplos como el de Alcibíades nos hacen dudar de lo «patrióticos» que podían ser los idealizados ciudadanos con su polis.
    Y tenemos el caso del romano Horacio, que en cuanto dieron la orden de atacar tiró su escudo y salió corriendo en dirección contraria, lo que nos derriba la imagen del legionario luchando hasta la muerte por Roma. Hay que tener cuidado con las idealizaciones y las edades de oro…muchas veces más míticas que reales.

  13. Vorimir dice:

    Me he explicado mal muchachos, si coincido con lo que APV explica. Sólo quería decir que Tsunetomo tenía más de samurai que Nitobe y que al menos el bushido no lo era del todo dewconocido, aunque lo que el reúne sean historias y pequeños consejos más que un libro ritualizado y dogmático.

  14. lantaquet dice:

    Pues cuando me enteré de que el arte ninja era totalmente opuesto al samurai me llamó la atención el hecho.
    El arte de los samurais elitista y honorable, reservado a los linajes que fueran, mientras que el arte ninja nace de las más bajas esferas sociales, donde por falta de buenas armas los tipos tenían que exprimirse el limón y utilizar todos los medios a su alcanze.
    Hechos por los que quzá resulten antagonicos ninjas y samurais en casi todos los aspectos.
    Ecepcional reseña Vori.

  15. Vorimir dice:

    jejeje, tengo en casa Lanta el Shoninki, un manual del siglo XVII para los ninjas, no creas que sólo se escribía para los samurais. Es uno de los «libros de cabecera» de los ninja. Pero sí, los ninjas no eran (o no tenían por qué) miembros de la casta samurai, de hecho muchos eran campesinos. Las más famosas aldeas ninja eran las de Iga y Koga que tanto han alimentado el folklore japonés sobre el tema. Los ninja no dejaban de ser espías, infiltradores y saboteadores, cuyo mito ha sido inflado por el folklore. El unificador de Japón, Tokugawa Ieyasu, tenía a Hattori Hanzo -un samurai de alto rango- como jefe de estos servicios secretos, y si no me equivoco sus descendientes heredaron el cargo. Pero los ninja solían ser mercenarios provenientes de las clases más bajas. Muchos eran espías que viajaban disfrazados de aquí para allá, y -más que posiblemente- el famoso poeta japonés del XVII Matsuo Basho fue uno de ellos.
    Pero bueno, al hablar del ninja hay que desligarlos del mito y de las películas, el 90% no eran tipos con pijamas negros tirando shuriken, y los que los eran no tenían poderes místicos, eran simplemente fuerzas especiales adiestradas en la infiltración, el espionaje, el asesinato y el sabotaje. Aparte de la espada ninja -eran como katanas más cortas y de peor calidad llamadas ninjato- y el cuchillo usaban armas más típicas de campesino como la hoz y la cadena. Los famosos shuriken eran armas para distraer y herir pero difícilmente eran letales, eso sin contar que a más de unos metros era difícil usarlos. El arco corto, los clavos para cubrir su huida y algunos tipocos de cuchillas eran otras armas típicas.

  16. Vorimir dice:

    Vamos, resumiendo, que si ya hay mito e idealización sobre la figura del samurai, sobre la del ninja suma y sigue.

  17. Antígono el Tuerto dice:

    Interesante lo que comentas de los ninjas (en las películas siempre salen vestidos de negro, je, je); por cierto el tal Hattori Hanzo no era el de las espadas de Kill Bill ;-)
    PD: A lanta le habría encantado ser ninja por lo que se ve.

  18. Hagakure dice:

    Blas Malo, muy buena explicación a la pregunta de Javi. Musashi era un enamorado y estudioso de la estrategia y de la importancia del trabajo e integridad personal. En él se encarna aquella máxima de las artes marciales atribuida a Ritsuke Otake, que dice:

    «Querer sacar la espada es la técnica del principiante.
    Poder sacar la espada es la técnica del experto.
    Ser la espada misma es la técnica del maestro.»

  19. Vorimir dice:

    Cierto Antígono, Hattori Hanzo es tb parte del folclore japones, un personaje muy mitificado con películas, novelas, series de TV y de ahí sacó Tarantino el nombre. Y además lo interpreta Sonny Chiba, actor del cine de acción japonés de los 80…

  20. Vorimir dice:

    Lo que mejor resume esa astucia y planificación de la que hacía gala Musashi es su último y más famoso duelo: el duelo en la isla Ganryu contra el famoso espadachín Kojiro Sasaki. Sasaki era un hombre noble y arrogante que llevaba bastante tiempo buscando ese duelo ya que era también un famoso espadachín victorioso de muchos duelos y quería demostrar que era mejor que Musashi. Sasaki luchaba con una katana muy larga y su técnica era el «corte de la golondrina», un golpe que desenvainaba la katana que llevaba en la espalda -por ser tan larga- y con el mismo movimiento golpeaba primero hacia abajo y después hacia arriba. Pues bien, cuando al final Musashi acepta su duelo en la isla Ganryu.. Musashi llega varias horas tarde a posta, poniendo nervioso a Sasaki. Además llega vestido de barquero, llevando el mismo la barba hcia la isla, por lo que al verlo llegar Sasaki piensa que Musashi ha vuelto a ignorar su petición y que el barquero viene a darle esa noticia. Pero no, Musashi salta de la barca y reta a Kojiro, que furioso y sorprendido encima acaba luchando con el sol de frente. para más inri, Musashi luchaba con dos armas, por lo que… mientras que con una mano empuñaba la katana con el remo que llevaba en la otra mano le acaba rompiendo la crisma a Sasaki, aprovechando la longitud del remo y la gran fuerza del propio Musashi. Evidentemente no podemos saber si todo es 100% como nos lo cuentan las fuentes y algunas presentan variantes a lo aquí expuesto, pero al menos puede darnos una idea sobre el carácter de Musashi y de como aplicaba la estrategia y la psicología al arte de la espada.

  21. Vorimir dice:

    PD: y de lo bruto que era. Su primer duelo a muerte lo ganó con 13 años cuando con un simple palo le abrió la cabeza -matándolo así- a un samurai provinciano que llegó a su pueblo armando jaleo.

  22. Hagakure dice:

    Efectivamente. El ninja es la antítesis de samurai. Se le requería para el trabajo sucio.
    Todos los clanes y facciones guerreras tenían su cuerpo de ninjas.
    Sus funciones y habilidades eran bastante variadas y podían variar de un ninja a otro.

    Tal como dices Vorimir, se cree que Matsuo Basho era un ninja; con funciones de espía más que otra cosa. Era especialista en el manejo del Bo (palo largo)y del Jo (palo corto). Un poeta caminante aparentemente inofensivo, que se apoyaba en un palo que bien usado era letal. Muy recomendable su libro: «Senda hacia tierras hondas», también llamado «Senda de Oku».

  23. Hagakure dice:

    Vori, ya podría ser que fuera así como mató a Sasaki. De hecho es claramente una variante de la técnica de las dos espadas. Si fue así, se trataría de una genialidad de
    Musashi.

  24. Urogallo dice:

    Lo estuve leyéndo hoy casi entero. Una lástima que no incluya notas críticas, por ejemplo, no explica el complicado sistema de homenaje presencial que obligaba a los daymios y a sus séquitos a pasar largas temporadas en Tokio, y que condiciona muchas de las anecdótas ( O casi todas)

  25. APV dice:

    Era uno de los mecanismos de seguridad que instauraron los Tokugawa.

    Respecto a la antítesis ninja/samurai en realidad en el S. XVI todo valía con una movilidad social total: cualquiera podía ascender a samurai o falsificar su ascendencia o un clan con gran pedigrí desaparecer, también se necesitaban agentes para las tareas sucias sin importar quien fuera.

    Respecto a Tsunetomo si era un samurai, pero hacía casi 70 años que no había habido guerras. Si incluso la esgrima se había refinado siendo diferente de la que se empleaba en los campos de batalla (donde por cierto la katana no era el único tipo).

  26. Vorimir dice:

    De hecho uno de los grandes problemas de los últimos siglos de la era Sengoku era el de los samurais-campesinos, samurais tan pobres que acaban viviendo como campesinos e incluso vendías sus armas y con el paso de las generaciones la pérdida de estatus era total. Toyotomi Hidesohi era hijo de una familia de estos samurais-campesinos. Huelga decir que hubo severas leyes que castigaban estas costumbres, pero la existencia de las propias leyes y su constante reiteración nos indicaban como de extendida fue esta «práctica social», en una época de continuas guerras, regiones que cambiaban de señor y familias enteras de samurais quedaban sin su sustento, etc…

  27. Urogallo dice:

    Me ha parecido curioso esa concrección temporal tan clara, yo me esperaba que citase más ejemplos de la antiguedad, de la época de las grandes guerras civiles.

  28. lantaquet dice:

    ¿Cuando unificó Japón Ieyasu?
    ¿Fue definitivo?
    Ya se que existe la wiki pero se esta aqui ten agustito comentando las cosicas…

  29. lantaquet dice:

    Como me conoce Tuerto, ninja es más del pueblo, jejejeje
    Pero aún así seguro que habría algún Samurai que realizó acciones ninja como comenta Vori (sabotajes, asesinatos, etc…) la mar de bien.
    Y sin embargo no se si al reves también.
    Aunque como comenta APV hubo una epoca en la que puede que si.

    Fascinante la cultura japo.
    Pd. El propio Vori me ha recomendado un par de pelis geniales (Mí vecino Tororo, y Ponyo en el acantilado), yo también recomiendo La princesa Mononoke, me impactó.

  30. Vorimir dice:

    Ya desde finales del XVI Oda Nobunaga y Toyotomi Hideyoshi conquistan diversas provincias y derrotan al anterior shogunato (gobierno militar) y abren las puertas de la unificación japonesa que ya consigue Tokugawa Ieyasu tras la batalla de Sekigahara, donde derrota precisamente al hijo de Hideyoshi. Pocos años después Toyotomi es nombrado nuevo shogún y su autoridad puesta por encima de cualquier señor feudal y de facto, por encima de la del propio emperador, cuya figura quedaba como un prestigioso adorno que legimitaba el gobierno Tokugawa (eran los protectores del Emperador y su imperio); el emperador quedó relegado para cuestiones religiosas y sociales. Con el shogunato Tokugaba acabva el periodo de guerras civiles entre diferentes daimyos -señores feudales- conocido como Era sengoku.
    Os recomiendo las novelas de Taiko, donde cuentan la historia de estos tres «unificadores» de Japón.
    Por cierto, que Miyamoto Musashi luchó de joven en Sekigahara en el bando perdedor, y salvó la vida por lo pelos. Básicamente saliendo por patas.

  31. Vorimir dice:

    @Uro: Por eso dije que eran buenos libros para la mentalidad samurai de esos siglos concretos. Supongo que el propio Tsunetomo quería elevar al máximo las virtudes samurais de los primeros años del shogunato Tokugawa para así de paso hacerle un poco la pelota a los descendientes de Ieyasu.

  32. Vorimir dice:

    @Lanta, si quieres pelis de anime de temática ninja/samurai pero con muuuchas dosis de fantasía apunta:

    Ninja scroll, el samurai sin nombre (sword of the stranger), y la serie de TV Basilisk (20 y pocos episodios).

    Eso sí, no son para verlas con los niños. XD

  33. APV dice:

    Voromir, la familia de Hideyoshi eran ashigaru creó, es decir no samurais.
    Precisamente él estabilizaría la situación convirtiendo a los samurais en pensionistas del estado.

    Lantaquet, Japón quedó unificado con la toma de Osaka, aunque hubo algunos recoldos como la rebelión Shimabara, el levantamiento Keian, las rebeliones ainu o campesinas; y diversas disputas domésticas.
    Y los clanes vencidos por Ieyasu siempre guardaron el deseo de devolversela, cosa que lograrían con la guerra boshin ya en 1868.

    Si constan acciones de comando realizadas por los samurais, y como señalé también hubo una época de gran flexibilidad para convertirse en samurai o decir que lo eras.

  34. Antígono el Tuerto dice:

    Lanta hará unos cuantos años, una década ¿quizá?, hubo una serie emitida en España titulada Samurai X: http://es.wikipedia.org/wiki/Rurouni_Kenshin
    Que relataba hechos históricos del final de la Era Tokugawa y el comienzo de la Era Meiji en el Japón, con el protagonista de un samurai.
    Mencionar que la serie no dejaba en buen lugar a los Meiji y sus tropas…aunque tampoco se quedaban mancos con los Tokugawa.
    Y películas estan las de siempre, Ran, Los Siete Samurais…las de Kurosawa.

  35. Vorimir dice:

    Bueno, sobre Hideyoshi hay de todo un poco. En teoría eran samurais muy empobrecidos que habían perdido su estatus, eran «samurais-campesinos». Bien es cierto que otros estudios nos dicen que los orígenes samurais no son del todo demostrables, blablabla. Vamos, es una figura con un origen algo oscuro y tb es normal que una vez llegó a ser un personaje tan influyente quisiese adornar su pedigrí haciéndose descendiente de samurais, pero bien es cierto también que el problema de los samurais campesinos era muy real, así que tan posible podía ser lo uno como lo otro. Pero es cierto, cabe cualquier posibilidad. :D

    Y sobre la unificación, pues lo he comentado a grosso modo, muy bien puntualizado por tu parte. :D

  36. lantaquet dice:

    Salvo ninjas croll no he visto ninguna, gracias chicos.
    ¿Sabeis que en una isla de Okinawa hay más de un 40% de la población que supera los 100 años de edad?
    Esta fue una isla independiente del Shogunato hasta mil ochocientos y pico, al parecer pertenecia ¿al reino Ryuku? por eso no me cuadraba lo de la unificación.
    Supongo que sería definitiva (la unificación) en esa «venganza» que comenta APV en 1868.

  37. Vorimir dice:

    Creo que más bien se refería a la caida del shogunato y la Estauración Meiji, de como muchos señores abandonaron el barco que se hundía. Fue la «revolución» que acabó con la casta samurai y sus privilegios. :D

  38. APV dice:

    Japón quedó unificado tras la caida de Osaka en 1615, el resto fueron diversos incidentes, pero el dominio del Shogunato era casi incontestable hasta la llegada de los occidentales.

    Al referirme a la guerra Boshin y a la caida del Shogunato, señalaba que la encabezaron los clanes del sur: Satsuma, Chosa, Tosa,.. que eran los antiguos miembros del ejército del oeste que habían luchado contra los Tokugawa en Shekigahara en 1600.
    Es por ello que era una «venganza», pues a fin de cuentas aunque vencidos y controlados eran los menos leales al Shogunato.

  39. lantaquet dice:

    ¿Y donde deja eso al reino Ryukyu hasta 1862/82)?

  40. APV dice:

    Su situación fue un poco especial en tanto dependencia de Japón y China; también podría hablarse de las Kuriles.

    Pero de facto la unificación política del territorio principal japonés tras las guerras civiles se realizó 1615, aunque antes de la guerra Onin Japón también estaba unificado en el anterio Shogunato.
    Así que en realidad la unificación remonta al fin de las guerras contra los emishi.

  41. Antígono el Tuerto dice:

    Y como podemos comprobar, lo que no sepa APV no lo sabe ni dios :-))
    Deberíamos hacerle un monumento en la web.

  42. Urogallo dice:

    Como diría Jaime Lannister: Los caballeros ven cosas peores…Los caballeros hacen cosas peores

    En todo caso todos estamos de acuerdo, Vorimir ya lo puntualiza muy bien: Lo que era un samurai de los siglos XVI y XVII, cuando, al no ser ya verdaderos samurais, se podían dedicar a pensar en que era lo que significaba serlo, para tratar de seguir reclamándo ese espiritu.

    Y APV lo termina de plantear, aparte de que del texto del propio libro se extraen ejemplos en situaciones ridiculas, formales, muy poco «bélicas»: Fiestas, presentaciones ceremoniales, calles de ciudades…

    En suma, ambientes muy poco marciales, de una exigencia bélica y moral muy limitada.

    Por cierto que Nitobe afirmó que la piedra esencial de la comprensión del Bushido era un concepto incomprensible y sin pararelo en la mentalidad occidental: Algo así como «Piedad filial» que ni siquiera intentó hacer comprender a sus lectores europeos y americanos.

  43. APV dice:

    No exageres, lo que pasa es que releí hace un tiempo el libro sobre los samurais de Clements.

  44. Antígono el Tuerto dice:

    Urogallo: «Lo que era un samurai de los siglos XVI y XVII, cuando, al no ser ya verdaderos samurais, se podían dedicar a pensar en que era lo que significaba serlo, para tratar de seguir reclamándo ese espiritu.»
    Algo así como los hidalgos españoles del Siglo de Oro, cuyos padres compraban el título de hidalguía por 4000 maravedíes y ya se creían ser unos auténticos caballeros. O como los caballeros del Renacimiento que se divertían en torneos y saraos aunque bélicamente ya no eran de utilidad alguna. Una casta guerrera debe mantener sus códigos aunque deje de ser guerrera…simplemente para mantener sus supuestos privilegios.
    PD: Jamás pensé que vería una cita de Ser Jaime en una reseña de samurais. Los caminos de Hislibris son inescrutables.

  45. Urogallo dice:

    O como los oficiales del XVIII, que llevaban la gola como recuerdo de la armadura…

    Sobre esto Geoffrey Parker ya fué bastante revelador en su momento: Una casta guerrera solo necesita códigos y reglamentos cuando ha dejado de serlo. El código se convierte en la forma de reconocer algo que, de otro modo, sería evidente.

  46. Urogallo dice:

    De otro modo = En otro tiempo, en otras circunstancias ( En circunstancias de guerra, de verdadera utilidad y exigencia de esa clase social)

  47. Vorimir dice:

    Aplaudo las intervenciones de maese Eurogallo. Muy acertadas.
    En otro orden de cosas, no sé donde leí que Sekigahara (¿o fue el asedio de Osaka?) fue la batalla con más armas de fuego hasta la primera Guerra Mundial. Pero… no lo encuentro así que lo mismo lo soñé o vete a saber. ¿Alguien que le suene el asunto?
    Más que nada lo comento para ilustrar la decadencia a la que la casta samurai estaba sometida en el campo de batalla: un campesino con un mosquete podía matarlos desde lejos. Lo mismo a lo que la caballería europea se enfrento durante la Guerra de los cien años con los arcos largos ingleses, lo mismo que a finales de la Edad Media llevó a la Iglesia a prohibir el uso de la ballesta -y quizás del arco largo, no lo recuerdo 100%- contra cristiano, y lo mismo que en las guerras de finales del XV y del XVI cuando arcabuces, mosquetes y artillería derrotaban a las cargas de caballería sin demasiados problemas (San Quintín, por ejemplo).

  48. Urogallo dice:

    Sería bastante dificil, porque por ejemplo en Sekigahara se calcula que estuvieron presentes más de 175.000 hombres, entre ambos bandos, y no todos serían mosqueteros. Solo en Gettysburg, hubo presentes 150.000 hombres. Y ahí si que todos tenían armas de fuego. Claro que en Osaka se calcula que hubo presentes en torno a 300.000 combatientes. Pero, ¿ Cuantos llevaban armas de fuego?.

    De todas formas, en Sedan se superó ampliamente la cifra de 300.000 combatientes, con poderosos trenes de artillería, así que es imposible que la afirmación sea correcta.

    El problema es que las castas dirigentes no eran lo bastante poderosas en todos esos países, y sus gobernantes recurrían a esas armas para equipar rapidamente ejércitos «baratos». En muchos otros lugares, elites militares menos famosas, prohibieron eficazmente los ejércitos de plebeyos que podían cuestionar su lugar bajo el sol.

  49. Antígono el Tuerto dice:

    Vorimir, lo que se intentó prohibir fue el uso de la ballesta contra enemigos cristianos; aunque huelga decir que los monarcas se pasaron la prohibición por el arco del triunfo. Y con las armas de fuego ídem.
    Como dice Urogallo, era más barato equipar inmensas masas de campesinos con ballestas, arcos o mosquetes y lanzarlos al combate que tener un ejército de guerreros aristocráticos de élite entrenados desde los 7 años.
    Los soldados de a pie eran más fáciles de reemplazar, y más baratos de alimentar y sostener.
    Y por supuesto, mucho más dóciles y sumisos.

  50. Vorimir dice:

    Lo mismo fue la batalla con más armas de fuego hasta la fecha, o lo mismo estoy totalmente confundido. Como me está gustando este hilo. :D

  51. Urogallo dice:

    Absolutamente descartado.

    Mukden, 1905.

    Más de 500.000 combatientes entre ambos bandos.

  52. Vorimir dice:

    ¿Y hasta la fecha -1600?

  53. Urogallo dice:

    Hasta la fecha, con toda seguridad, las cifras del asedio de Osaka son brutales.

  54. Darklyes dice:

    La verdad es que estoy bastante pegao en cuanto a este tipo de temáticas. Nunca me ha dado por leer sobre samurais y ninjas, pero estoy enterándome de un montón de cosas interesantes gracias a vuestros comentarios y por supuesto a la reseña de Vorimir… ojalá todos los hilos fueran como este…

    Saludos

  55. Loki dice:

    Hola a todos… soy nuevo en el foro y realmente me ha encantado, la información que comparten es más que interesante y agrada el encontrar un «lugar» donde conviven, quizá, distinto puntos de vista sin generar discordia. Ahorá bien,vamos al tema en cuestión, he leído muchas veces el bushido, tanto lo he absorbido y aceptado que he intentado formar con el un «estilo» de mi vida a seguir. Durante mucho tiempo dude, de ahí la cantidad de veces que lo releí y analice. Finalmente llegue a la obvia conclusión diría yo, de que el bushido no debe ser analizado en base a lo que los samuráis hicieron, sería como analizar la biblia cristiana en base a lo que sucede en el Vaticano o lo que los mismos cristianos hacen en el día a día (pocos actúan verdaderamente en base a lo que profetizan). No creo que el hagakure haya tenido como fin la exaltación de la casta samurái reinante sino por el contrario demostrar su equivocación. Cuando uno estudia el accionar de estos personajes es cierto lo que comentan los bien ilustrados compañeros del foro, los samurái distaban mucho de ser honorables visto desde el punto mismo del bushido, pero esa es su equivocación, no corresponde castigar el código por lo que los hombres hacen con el. Personalmente creo que el camino del guerrero es hermoso y bien puede ser empleado en la vida, este no habla sobre ir libremente por el camino matando todo lo que se cruce en nuestro camino, a mi entender es todo lo contrario y algo así es plasmado en el anime samurái x antes mencionado, donde batusay, un samurái de primera orden decide retirarse de la linea de batalla y servidumbre para emprender un camino sin fin en busca de la verdad y la justicia jurando no desenvainar su espada salvo una real e ineludible necesidad.
    En fin, creo que el código no es tan cerrado como algunos lo toman, es decir, no siempre es explícito y puede ser entendido de diversas maneras aunque a mi modo de ver a lo que menos incita es al asesinato innecesario, al abuso de poder, a la esclavitud, etc. Entiendo que samurái puede ser todo aquel que sea capaz de seguir los pasos del camino del guerrero y todo lo demás es invento humano para propio beneficio.
    Eso es todo amigos, estén de acuerdo o no agradezco su lectura y felicito su hermosa y excelente convivencia en este sitio.
    Muchas gracias.

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