ÁNGELES ASESINOS – Michael Shaara

ÁNGELES ASESINOS. Michael ShaaraNo hay nada mas parecido a Dios en la tierra que un general en el campo de batalla” Michael Shaara.

En junio de 1863, después de más de dos años de guerra civil, el general de las fuerzas confederadas Robert.E.Lee decide cruzar el río Potomac con un ejército de 70.000 soldados. La intención de Lee trasladar la guerra a tierras norteñas, Maryland, y atraer así al ejercito de la Unión, 80.000 soldados, con el objetivo de que al defenderse queden en terreno descubierto.

Ángeles Asesinos es una novela dura que nos explica de forma detallada el encuentro de estos dos ejércitos en el pueblo de Gettysburg. Serán tres días de combate brutal, con una cifra de bajas espeluznante: 50.000 soldados.Para los amantes de las novelas bélicas, vais a disfrutar mucho de la lectura.Para los que les guste la novela histórica sin lugar a las tergiversaciones, os va a encantar.Para los que queréis conocer grandes personajes, auténticos héroes, también los vais a encontrar.Y para los que busquen algún mensaje de humanidad dentro de la barbarie también lo vais a encontrar.

Personalmente he disfrutado muchísimo con la lectura, ya que el autor no deja tiempo para el aburrimiento.De entre todos los grandes personajes que aparecen en la novela me quedo con dos: el coronel de la Unión Joshua Chamberlain, por dos momentos que sobresalen por encima del resto: el discurso que les da a 100 soldados amotinados bajo sus órdenes, y sobretodo la carga con bayonetas en el segundo día de conflicto.Y el segundo por ser uno de los mayores generales de la historia de la humanidad: Robert.E.Lee. Creo que Lee después de innumerables victorias, con un ejército muy inferior en número al de la Unión, y en su mayoría soldados no profesionales, esta a la altura del mismísimo Napoleón o Aníbal.

Recomiendo también la lectura de Ángeles Asesinos para todos aquellos que tengan una idea confusa de la Guerra de Secesión, y crean en los buenos eran los de norte y los malos los del sur.En este sentido Michael Shaara lo borda, no hay buenos ni malos, no se trata simplemente de una lucha por la esclavitud, es una guerra civil entre “hermanos” y como toda guerra no hay una causa concreta.

Ángeles Asesinos es una novela bélica imprescindible para los amantes de la historia.

Para los que quieran complementar la lectura del libro, saber que existe la película Gettysburg (1993) protagonizada por Martin Sheen (Lee), Jeff Daniels (Chamberlain), y Tom Berenger (Longstreet). También existe una precuela del libro Ángeles Asesinos escrito por Jeff Shaara (hijo de Michael) titulada Dioses Y Generales, y de la cuál ya tenemos una magnífica reseña de Valeria. Tiene también su adaptación al cine con el mismo nombre que el libro y protagonizada por Robert Duvall (Lee) y Stephen Lang (Thomas Stonewall Jackson). Tanto el libro, Dioses Y Generales, como la dos películas muy recomendables también.

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54 comentarios en “ÁNGELES ASESINOS – Michael Shaara

  1. Nes dice:

    Hola,

    Gracias por la reseña, estaba pensando ultimamente en buscar alguna novela sobre este conflicto y me has facilitado la tarea.

    Un saludo

  2. CORCONTAS dice:

    Saludos,

    Muchas gracias tambien por la reseña, yo ya he leído el libro y pinso lo mismo que tú, aunque a mí se me hizo un poco mas pesada.

  3. Javi_LR dice:

    ¡Feliz estreno, Belibaste! Siento la demora con la que ha sido publicada la reseña.

  4. juanrio dice:

    Me sumo a las felicitaciones, Belibaste. Tengo este libro pendiente de adquisición, ya que me he leido el de Dioses y generales y es un tema que me llama la atención. Tu reseña hace que aumenten las ganas que tengo ganas de echarle mano.

  5. ander dice:

    Extraordinaria novela. Sólo queda que alguna editorial se anime a publicar el resto de libros dedicados a la guerra civil escritos por Jeff Shaara, así como los dedicados a la guerra con Méjico y la guerra de independencia Americana.

  6. Richar dice:

    Saludos,

    pues me uno a las felicitaciones por el estreno de Belibaste, y también a los que lo han apuntado en la lista de favoritos. Si lo veo, al zurrón.

    Saludos,
    richar.

  7. Aretes dice:

    A éso le llamo yo un estreno, Belibaste.

    Da gusto leer la intención de convencer al lector, desde luego no faltan argumentos: para los que les gustan las batallas, los personajes, la historia, el tema… (parece tan universal como la Cocacola).

    Y rematada con otra reseña y la película correspondiente.

    Gracias y enhorabuena.

  8. Akawi dice:

    Tal y como le comenté a Koenig, aún no me he adentrado en las guerras de norteamérica,; esta novela también me la anoto para un futuro pues son épocas muy interesantes, tanto la Guerra de Secesión como la de Independencia.
    Me ha gustado tu reseña, ánimo porque la primera es la que se hace más difícil y tu ya la has superado.
    Un abrazo Belibaste.

  9. Marbenes dice:

    Yo pasaba por aquí y he querido felicitarte por tu estreno (es que la historia norteamericana aún no me ha enganchado pero tu reseña es muy buena y casi me dan ganas de replanteármelo) ¡Enhorabuena!, y ya que has empezado no lo dejes ahora, ¿eh?

  10. Incitatus dice:

    Enhorabuena Belibaste por tu estreno.

    En cuanto a Lee, y por animar el debate, ¿no es un poco demasiado subirle al pedestal de Napoleón o de Aníbal? sin duda era un gran táctico, pero no estoy tan seguro que fuera un gran estratega. Animo a que me ataquéis, que no conozco mucho al personaje y con esto siempre se aprende.

    De nuevo enhorabuena Belibaste es una época que nunca me había planteado en novela, pero esta apetece.

  11. Atilio dice:

    «La guerra es una masacre entre gentes que no se conocen, para provecho de gentes que sí se conocen pero que no se masacran.»
    Valèry.

    Una reflexión con la que me topé y que, ciertamente, da mucho sobre lo qué pensar…

    Buen estreno.

  12. Incitatus dice:

    No la conocía Atilio pero Valèry tiene más razón que un santo, sin duda

  13. Licurgo dice:

    Bueno, Incitatus (un nombre apropiado), recojo en guante, aunque no sólo para matizar.
    Pese a encantarme la figura de Lee, hay que reconocer que era un general napoleónico, de manual (no en vano era el director de West Point) y la guerra en la segunda mitad del siglo XIX necesitaba ya un general de la Revolución Industrial; un Ulises S. Grant, más maleable, más estratégico y mucho más económista.
    Decían que Lee ganaba batallas mientras Grant ganaba la guerra.
    Ya no era tiempo de ganar la batalla decisiva que devolviera a casa a los combatientes, no era tiempo de un Austerlitz, de un Jena/Auestadt… y eso que Lee la tuvo en la palma de la mano al principio de la guerra; si hubiera continuado hasta Washington después de la victoria de la Primera Batalla de Bull Run…
    Era un magnífico general, una figura extraordinariamente carismática, pero como algunos de los grandes oficiales, estaba fuera del tiempo en la que hubiera destacado como un genio en el Arte de la Guerra.
    Saludos.

  14. Belibaste dice:

    Lo primero agradeceros a todos los comentarios sobre esta mi primera reseña.Cuando me he conectado esta tarde y he visto 14 comentarios me ha dado una alegria tremenda.Cuando he acabado de leer vuestros comentarios, y aunque parezca algo cursi, me he emocionado.
    Para mi es un honor poder ver mi reseña en Hislibris, y si alguien compra este libro porque mi reseña le ha acabado de convencer sentiria un orgullo tremendo.
    Por desgracia para mi, la afición a la lectura me ha llegado con 28 años, ahora tengo 32, y siento que estoy a años de luz de la mayoria de vosotros en lo referente a historia. De verdad agradeceros a todos que hacéis que cada dia descubra un nuevo personaje, una nueva batalla, un nuevo libro… Gracias!.

  15. Anraman dice:

    Bueno, podemos discutir más o menos sobre la valía de Lee, pero lo que creo indudable es que tenía un carisma enorme. Sus soldados le hubieran seguido hasta el fin del mundo. En eso sí que era un Aníbal o un Alejandro y ahí estoy con Marbenes.

    La confederación, por lo que parece (se cuenta, de hecho en el libro) sí tenía un general de la «revolución industrial», claro que lejos del carisma de Lee o Stonewall Jackson: me refiero al general Longstreet. No dejé de sentir cierta pena por él cuando leía el libro.

  16. Anraman dice:

    Perdón, donde decía Marbenes quería decir Belibaste :-P Pues eso…

  17. Koenig dice:

    Buenas noches.

    Mi estimado Licurgo, Lee no estuvo en la Primera Batalla de Bull Run. En aquella batalla estuvieron Joseph E. Johnston y P.G.T. Beauregard.

    En aquellos tiempos Lee era desconocido. Mas adelante, y tras una triste campaña independiente al frente de una pequeña tropa en Virginia del Oeste, ocuparía el cargo de asesor militar de Jefferson Davis, el presidente confederado, para pasar a comandar el ejército de Virginia del Norte a raíz de ser herido Johnston el primer día de la batalla de Seven Pines.

    Así pues no se le puede culpar por no perseguir a los federales tras la primera del Bull Run. También se puede añadir que tras esa batalla el ejército confederado estaba tan desorganizado que cualquier persecución hubiera acabado fácilmente en desastre de enfrentarse con una mínima fuerza organizada. En relidad Bull Run fue una victoria táctica confederada, pues conservaron el terreno. Pero estratégica de la unión, que no perdió la iniciativa.

    Con respecto a Lee. Era muy bueno a nivel operativo (el intermedio entre el táctico y el estratégico, que por cierto no se había inventado entonces). Sabía moverse y posicionarse y su ejército siempre estuvo delante del avance de la unión cuando fue necesario, y en plena ofensiva cuando la unión se retiraba.
    A nivel táctico no fue un mal oficial. Pero la táctica no era su cometido. Para ello contaba con sus jefes de ala: Jackson y Longstreet. Excelentes tácticos ambos, Jackson mas bien en el plano defensivo y Longstreet en el ofensivo.
    Desde el punto de vista estratégico Lee no intervino. La coordinación entre el frente de virginia, y los del oeste, a ambos lados del Mississippi, no era competencia suya. Y fue un error, porque se encontró combatiendo en un escenario donde se ganaba la fama, donde mas altas parecían las apuestas, pero donde no se podía ganar la guerra.

    Aprovecho también para agradecer a Belibaste su incorporación al «reseñator´s team» con esta reseña sobre una magnífica novela que no he leído. Lo haré. Aunque he visto la película (incluso se la endiñé a mi actual esposa cuando éramos novios y a mi me gustaba rozar la catástrofe :-) ). También he leído «Dioses y Generales», que aprecié mucho dado el trato humano que daba a los grandes protagonistas de la historia.

    Saludos.

  18. Incitatus dice:

    Gracias Koenig, buena exposición, como ya he dicho conozco poco la guerra de secesión… me tendré que meter un poco más. En mi opinión de todas formas, como ocurre con casi todos los bandos perdedores, hay un cierto romanticismo que los eleva por encima de la realidad, ¿o no?

  19. Licurgo dice:

    Ok, sí, cierto; perdón, en lo que estaba pensando era en la estrategia global del Sur.
    Sorry.
    Saludos.

  20. Koenig dice:

    Buenas noches Incitatus.

    El sur tuvo, a la vez que grandes oficiales, algunos pésimos, como Braxton Bragg o Leonidas Polk en Tennessee, o John C. Pemberton en Vicksburg.

    Realmente la gran diferencia entre ambos bandos fue que si las grandes estrellas confederadas brillaron en el este, las federales lo hicieron en el oeste. Sin embargo la guerra era casi imposible de ganar en el este, por muy malos que fueran los ejércitos federales allí.

    Saludos.

  21. Se ve que a mí me pilló en algún mal momento porque me aburrió, no llegué a conectar en ningun momento. Tendré que releerla.

  22. Licurgo dice:

    El gran problema, desde mi punto de vista, fue la inadecuación de la mentalidad sureña a una guerra que la revolución industrial obligaba a cambiar.
    Me explico; el planteamiento del Sur era el de una estrategia propia de principios de siglo XIX. De una guerra normalizada, es decir, con unas ciertas reglas que la encorsetaban.
    Mientras que la realidad del momento exigían un cambio hacia una estrategia propia de principios del siglo XX, en la que había que hacer ver el precio del conflicto a la población civil, en la que había que eliminar las fuentes de recursos que mantenían al enemigo.
    De ahí que la operación Anaconda fuera desarrollada por Grant y que no hubiera una estrategia similar por parte del Sur.
    Veo dificil que Lee aceptara y alentara un raid en el Norte por parte de Stuart, del mismo modo que lo hizo Grant en raid de Atlanta de Sherman.
    Las diferentes incursiones del ejército de Virginia en territorio norteño (una de las cuales es la que derivará en la batalla de Gettysburg) no buscaban una estrategia amplia si no una victoria decisiva que les diera argumentos para una negociación: como he dicho antes, buscaban un Austerlitz, un Jena o un Marengo (por asimilar a Lee a Napoleón).
    Lee era un general convencional, he ahí su grandeza y su debilidad.
    Grant era un general poco convencional con una gran capacidad de adaptación (a lo que hay que añadir la inagotable capacidad de recursos del Norte).
    Y la guerra de Secesión americana es la gran frontera entre la guerra decimonónica y la de la guerra de materiales del siglo XX.

    Lee me recuerda un poco a Dario en la batalla de Gaugamela, constreñido por la tradición, esclavo de un modo de combate obsoleto pero hermoso (esto con todas las comillas que se le puedan añadir). Estructurando toda la estrategia de la batalla y la orografía del campo de batalla en torno a la guerra de carros… y teniendo enfrente a un ejército que ha superado ese modo de combatir y bajo el mando de un rey, Alejandro Magno, con una flexibilidad y una capacidad para la innovación enormes.
    ¿Os imaginaís a Lee aprobando y ordenando a su caballería prender fuego a Nueva York (por ejemplo)?.
    Como bien dice Incitatus un tipo de ejército así, un general así, una fuerza derrotada así, constituye una hermosa idea romántica.
    Saludos.

  23. Licurgo dice:

    Por cierto, creo que el culmén de la idea romántica a la que se aludía antes, la tenemos en la carga de Picket, equiparable si no supera directamente, a la carga de Balaclava.
    saludos.

  24. Valeria dice:

    Bueno, Belibaste, enhorabuena por la primogénita. Yo no he leído esta novela y antes de hacerlo aún tengo otra pendiente sobre el tema, reseñada por Rodri, «La gran marcha» de Doctorow. Pero de mis otras lecturas, incluyendo Dioses y Generales, sí recuerdo como una opinión mayoritaria la que ve en esta contienda la última guerra entre caballeros, una forma de hacer la guerra donde aún se tenían en cuenta ciertas líneas rojas que cualquier honorable combatiente debía respetar.

    Eso, teniendo en cuenta que no hay guerra buena.

  25. Clío dice:

    ¡Felicidades Belibaste por tu primera reseña! si que emociona, sí.
    Interesante libro, apabulladita me teneis con los niveles operativos, tácticos y estratégicos (que voy a tener que buscar en google, para enterarme de algo) lo malo es que yo soy más de «lo que el viento se llevó» y no se yo…..

  26. Koenig dice:

    Buenos días.

    Tienes razón en mucho de lo que dices, Licurgo. Ciertamente entre 1861 y 1865 se pasó de la guerra política a la económica. El norte fue quien mejor se adaptó a este cambio, sin embargo el sur también hizo sus pinitos, principalmente mediante el embargo de algodón decretado a principios de la guerra, con la intención de provocar la intervención del Reino Unido, Francia y Rusia en defensa de sus economías nacionales. Estuvieron a punto de lograrlo. De esas fechas son las primeras grandes plantaciones de algodón en egipto y en asia central.

    Y como muy bien dices Lee era un general convencional, un muy buen general convencional con un alto sentido de la maniobra. Sin embargo hay que tener en cuenta que la guerra del sur era distinta. El sur pretendía defenderse y vencer al norte obteniendo el reconocimiento internacional y por agotamiento. Era el norte quien tenía que reconquistar el sur para la unión. En ese sentido gana mucho sentido el raid de Sherman, destinado a demostrar al sur que la guerra no era una mera cuestión fronteriza y militar.

    Desde el punto de vista de Grant, fue un ferviente partidario del plan Anaconda propuesto por Winfield Scott al principio de la contienda. Dicho plan se basaba en el dominio del mar y de los ríos. Con las fuerzas navales confederadas en permanente bloqueo, el norte podía golpear en cualquier sitio del litoral marítimo o fluvial, cosa que el sur no podía hacer. Con ello se amplió enormemente el frente defensivo del sur, que tuvo que dispersar recursos para defenderse, sin que se ampliara el del norte, que pudo concentrar los suyos donde y cuando quiso. Es un interesante ejemplo de oposición entre la teoría de las líneas interiores y la del control de la periferia.

    Por lo demás la gran característica de Grant no fue tanto su modernidad y su aplicación del plan Anaconda como su capacidad para volver al combate al dia siguiente de una gran batalla, incluso de una derrota. Cuando tras su derrota en Wilderness (1864) el ejército de la Unión sigió avanzando, rompía todas las reglas anteriores que exigían una retirada y una reorganización. Lo único que pudo hacer Lee en esta tesitura fue volverse a poner delante, un poco mas atrás, una y otra vez, hasta que acabó asediado en Richmond-Petersburg. Para Grant fue la forma de romper la superioridad de Lee y el ejército de Virginia del Norte, pero para su ejército fue una sangría que nunca se le hubiera perdonado sin Appomatox.

    En fin. Pido disculpas a Belibaste por secuestrar su reseña de semejante modo.
    Y a Licurgo si mi anterior intervención tras su comentario ha sido demasiado brusca.

    Saludos.

  27. Incitatus dice:

    A mi personalmente me está interesando mucho este hilo, y el debate que mantenéis Licurgo y Koenig. Seguid, seguid…

  28. juanrio dice:

    Me sumo a lo dicho por Incitatus, y dudo que a Belibaste le moleste que habléis del tema del libro que ha reseñado.

  29. Koenig dice:

    Buenos días.

    En realidad mas que debatir, nos completamos. Es mas, sospecho que tenemos fuentes en común sobre el tema.

    Saludos.

  30. jordimon dice:

    Buenos dias a todos.
    El nivel de las intervenciones me parece muy alto, pero a riesgo de que me acribilleis hare un par de precisiones:
    a) Koenig mencionaba a Jackson como general defensivo y a Longstreet como defensivo. Creo que la opinión mas generalizada es justamente la contraria. De hecho, es a la falta de mordiente ofensivo a la que se imputa una parte importante de la derrota confederada en Gettysburg. Y se ha planteado muchas veces la duda de que hubiera pasado si Jackson no hubiera muerto poco antes a resultas de sus heridas en Chancellorsville.
    b) Presentar a los generales confederados como los ultimos caballeros… no se, me parece un tanto romantico. Lee o Jackson eran profesionales muy conscientes de que la guerra es matanza. Me gustaria conocer mas sobre el tema, pero me da la sensación de que ese aspecto ha sido un tanto exagerado por una cierta filia hacia la causa sureña… eso de la «causa».
    Un saludo cordial

  31. Koenig dice:

    Buenas tardes.

    Concreto lo de Jackson y Longstreet.

    Partiendo de la base de que ambos fueron excelentes jefes de campo, hay que analizar sus campañas para definirlos.

    Si nos fijamos en Jackson sus cualidades principales eran dos: desplazarse muy rápido y posicionarse en un lugar clave para el contrario, forzando el asalto, que el resistía en posiciones defensivas. Así lo vemos a la defensiva en la 1ª del Bull Run (Henry Hill), en algunos encuentros de la campaña del valle como Mc Dowell y Cross Keys, actúa muy mal en la campaña de los siete días, donde su rol es principalmente ofensivo, y no es un gran éxito la batalla de Cedar Mountain, pero luego tenemos la 2ª del Bull Run, donde resiste un día entero en la vía férrea hundida; Antietam, donde aguanta los primeros asaltos de la unión en el ala izquierda de Lee y Fredericksburg en el ala derecha. Chancellorsville fue su principal acción ofensiva en cuanto a número de tropas disponible, aunque el paso preliminar fue una audaz maniobra para atacar la retaguardia de la unión.

    Si Jackson era el yunke, Longstreet era el martillo de Lee. Así en los seis días su acción es mayoritariamente ofensiva, en la 2ª del Bull Run es él quien flanquea al ejército de Pope y lo destruye, y en Chancellorsville, es la otra pinza del asalto confederado al ejército de Hooker. A diferencia de Jackson o Lee Longstreet combatirá también en el oeste. En Chickamauga será el quien rompa el ejército de Thomas, a pesar de que su reticente comandante en jefe, Braxton Bragg, aboga mas bien por una defensa rígida, e interferirá en la persecución de los unionistas hacia Chattanooga. Tras esto combate en la batalla de Wilderness, y a pesar de que es la unión la que ataca, él asalta a su vez al 2º Cuerpo de Grant y lo expulsa del campo de batalla.

    En todo caso ambos sabían comandar acciones tanto ofensivas como defensivas. Aunque cada uno alcanzó la excelencia en lo suyo.

    Con respecto a Gettysburg. Longstreet fue tibio porque no creía en el plan de Lee, que tuvo una semana nefasta y se empeño en atacar. De hecho, Longstreet le recomendó que no lo hiciera, que flanqueara a los unionistas y se posicionara entre ellos y Washington, que de paso era también entre ellos y Virginia. Sin embargo Lee no accedió. La influencia que sobre él tenía Jackson, no la tenía Longstreet. Y es lo que podría haber cambiado de no haber muerto Jackson. La batalla hubiera podido trasladarse a otro sitio.

    Saludos.

  32. farsalia dice:

    Interesante novela, interesante debate e interesante reseña, ¡pardiez! Tengo la novela vista en librerías y no me atrevía a llevármela. Creo que me lo replantearé…

  33. Incitatus dice:

    Los que no sabemos nada de este periodo estamos leyendo con fruicción, por lo menos este caballito senador

  34. Licurgo dice:

    En primer lugar, Koenig, gracias por tan noble gesto; el tirón de orejas era merecido (aunque escociera algo). Ya decía San Agustín; «yerro, luego existo».
    Como dices, este debate no es una sucesión de posturas enfrentadas, si no una matización de las existentes.
    Respecto a Gettysburg, desde la perspectiva de la Historia, coincido contigo en que el posicionamiento del ejército de la Unión hace dificil entender el empecinamiento en el ataque de Lee. La batalla exigía maniobra y no la sangría que se produjo sobre todo en Cementery Hill.
    Por otro lado, no estoy muy seguro de que el embargo del algodón y la búsqueda de la intervención europea se pueda enmarcar dentro del espectro de una guerra moderna: el juego diplomático se venía haciendo desde el siglo XVIII.
    Sin embargo, los planteamientos nordistas a partir de mitad del conflicto sí son sumamente innovadores, incluida la movilización ingente de recursos por parte de este (síntoma de lo que vendría medio siglo después en los campos de la PGM).
    Los observadores prusianos aprenderán mucho de este conflicto y lo aplicarán a las guerras contra Austria y Francia de la década siguiente. Sobre todo el control del ferrocarril y el devastador uso de las nuevas armas (presumo que observarían, también, en acción a la primera ametralladora; la gatling) se puede debatir largo y tendido.
    Saludos y de nuevo gracias por la deferencia y el fair play.

  35. Licurgo dice:

    Lástima, Incitatus, que hay tan poco publicado en nuestro idioma.
    Las editoriales prefieren concentrarse en la SGM, antes que publicar de otros conflictos.
    Saludos.
    PD.- como decía un librero amigo; «las editoriales venden libros, no cultura».

  36. Belibaste dice:

    Koening, Licurgo estoy disfrutando de lo lindo con vuestros comentarios, a la vez que aprendiendo un rato. Koening, pero como me va a molestar la información que estais dando!!!, todo lo contrario, gracias por las clases gratis de historia.

  37. Aretes dice:

    Inciso: Belibaste ¿pagaste ya los mil euros para que te incluyan en la lista de quienes somos?

    Javiiiiiiiiiiiii

  38. Hola, buscando blogs con reseñas de libros militares os he encontrado. Me he permitido el lujo de mostraros en mi blog: http://actualidadmilitar.blogspot.com

    Muchas gracias por vuestro trabajo.

  39. Licurgo dice:

    Tiene buena pinta, enhorabuena.
    Saludos.

  40. Juanfran dice:

    De temática militar, de libros de historia militar yo os recomiendo Novilis, http://www.novilis.es , muy bueno, con todas las novedades editoriales y con reseñas de libros nuevos y viejos, donde por cierto está publicada hace algunas semanas esta misma reseña.

  41. Vorimir dice:

    Jar, que buena pinta tiene el libro reseñado.

    Si alguna vez me arranco a leer sobre este tema me los pillo sin dudar.

  42. Belibaste dice:

    Aretes ¿1000 euros?, ya no entiendo nada a mi me ha dicho Javi que eran 1200 euros!!!. Me imagino que sera el dichoso Euribor.

  43. Aretes dice:

    Eso es precio de romano, claro.

  44. Belibaste dice:

    ¿Tan mala es la reseña que no salgo en el «Quienes Somos»?

  45. Germánico dice:

    Hum… me parece que no eres el único. Se impone revisión…

  46. Javi_LR dice:

    Sip. Ya está arreglado. Faltaban cuatro. Disculpa, Belibaste.

  47. Belibaste dice:

    No necesitas disculparte Javi.Si fuese yo el que gestionase hislibris me faltarian todos, ya que me imagino que «esto» necesita su tiempo.Gracias y decirte que estas haciendo un buen trabajo, Felicidades.

  48. Aretes dice:

    Ya, ya pero ¿has pagado o no? ¿eh?

  49. Belibaste dice:

    Aretes creo que con el comentario que le he hecho a Javi esta saldada la cuenta, ¿no?.

  50. Javi_LR dice:

    ¿Ya están saldados esos 1200 euros? Joé, corre el dinero por aquí que es un primor.

  51. Valeria dice:

    Con mucho retraso por mi parte estoy leyendo Ángeles asesinos, y me está gustando mucho. No podría decir si más o menos que Dioses y Generales , porque hace demasiado de aquella lectura, pero me está gustando. La acción está muy localizada espacial y temporalmente, y también personalmente: Gettysburg y sus generales, y aquellos tres días sangrientos de 1863.

    Pero se aprecian en esta novela sutilezas que van más allá de la narración de los sentimientos de los soldados implicados o los movimiento de tropas en la batalla. No sólo se profundiza en la reflexión del hombre -cualquier hombre, cualquier soldado- abocado a una lucha contra sus hermanos, contra sus amigos, contra su tierra, en la obediencia de un soldado ante unas órdenes que sabe abocadas al fracaso, o la soledad del mando. El autor va dejando caer como de soslayo una serie de reflexiones e hilos menores acerca de las causas de la guerra, y de las falacias de la propaganda bélica. Los sentimientos de los soldados de la Unión ante los negros, frente al manido tema de la esclavitud como excusa bélica; la postura de las potencias extranjeras, especialmente Inglaterra; las razones y las posteriores consecuencias del embargo del algodón, la importancia del honor y la independencia para los soldados del Sur, el desprecio del Norte ante la «aristocracia» sureña etc. Muy interesante.

    Por cierto, y comentario anecdótico, el libro también incide en la fama de Longstreet como general «defensivo». Aunque luego le toque siempre a él el peso de las ofensivas. Tanto el personaje de Lee como otros generales así lo consideran en la novela.

  52. Lucía dice:

    He leido hace poco esta estupenda novela.

    ¿Qué decir que no hayais comentado antes? poca cosa. Llegué a la novela a través de la película Getysburg, y ahora, una vez terminado el libro se funden ambas; con la novela completo las personalidades y, en ciertos aspectos, las vidas de los personajes que aparecen en la película ( muy buena adaptación del libro) y con la película le he puesto cara a todos estos militares que tan sangrientamente lucharon allí; para mí Chamberlain tendrá siempre el rostro de Jeff Daniels.

    Como muy bien explica Valeria la novela tiene una gran cantidad de facetas que, sin alejarnos de la narración principal, los tres días de batalla, nos ofrecen una visión muy completa de todo ese momento histórico.

    La lectura es muy fácil sin que esto quiera decir simplista, al contrario, el autor consigue atraparte casi sin que te des cuenta y cuando terminas su lectura quieras leer más sobre todos estos protagonistas de la historia.

    A Belibastre felicitarlo por su reseña que nos descubre una novela de tan grata lectura.

    Estoy pendiente de recibir Dioses y generales que espero me deje tan buen sabor de boca como Ángeles asesinos.

  53. guijua loz dice:

    Gratificantes novelas, con buen trama de una sin igual lucha de poder territorial,en donde se entrelasa en parte el racismo mas atenue en esos tiempos,que hoy todavia se da.

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