EL PRÍNCIPE DE LA IMPRENTA – Enric Satué
10 dEurope/Madrid junio dEurope/Madrid 2025
Uno de los nuestros cuenta la historia de Claude Wheeler, un chico de Nebraska hijo de un granjero muy bestia y una ex-profesora muy culta. En el Medio Oeste americano de principios de siglo XX no hay gran cosa que hacer: puedes acumular tierras (como papá Wheeler), puedes trabajar los campos (como casi todos sus vecinos, como su hijo Claude) y, en general, puedes ver pasar la vida sin esperar gran cosa de ella. Te casas, si tienes suerte, con una persona adecuada; si no, te aguantas y vuelcas tus esperanzas en la cantidad de dinero que sacarás al año que viene si el frío no echa a perder la cosecha, si llueve lo que tiene que llover y poco más. » seguir leyendo
Bariloche, la ciudad más poblada de La Patagonia, es conocida por su turismo de nieve. Allí reside una importante colonia descendiente de emigrantes europeos, una elección debida probablemente a la afinidad climática con Alemania, Suiza o Noruega. Se da la circunstancia que, al igual que en el resto de Argentina, los judíos y los nazis huidos de Europa habitan en los mismos barrios. Se conoce en qué casa habita quién. Recuerdo el testimonio de una encantadora bobe (así es como llaman los judíos a sus abuelitas) que me señalaba en su barrio de Olivos en Buenos Aires casas habitadas por viejos nazis. Se sabe pero, aún hoy, se calla. El tema de la acogida a los nazis en la Argentina del general Perón está bastante estudiado, como lo está la colaboración de gobiernos como el de Franco o el Vaticano en las rutas de escape de aquellos incalificables sin conciencia ni escrúpulos que marcharon cargados únicamente con su conciencia vacía y el peso del dinero en sus abultadas cuentas corrientes provenientes del expolio. » seguir leyendo
Hislibris, ese lugar que nos ha reunido como alrededor de una fogata, donde el termino «pila de libros» sustituye al maratón de series (no lo excluye, no, que algunos parecen tener tiempo infinito), donde se discute acaloradamente diciendo «soy de la opinión», donde se bebe y se come tanto como se lee (¿quién podría crear una serie de actos bajo el lema «Cervezas y libros»?), donde hay un ranking de páginas leídas por hora, donde se han reseñado más de tres mil libros, se han vertido cientos de miles de opiniones…, donde las BBDD nos roen los bolsillos día a día (pozo sin fondo, puerta abierta a otras dimensiones), donde… Hislibris, ese lugar que cumple ya 20 años y nos convoca a sus XIII Encuentros. » seguir leyendo
Tomando como partida dramática el origen vital del agua como característica primordial de su efecto creador y una escena primigenia localizada en el palacio de rey Asurbanipal en la ciudad de Nínive, la autora británico-turca, Elif Shafak, construye una evocadora novela que presenta al lector tres historias paralelas localizadas en Londres, en la segunda mitad del siglo XIX y en los años 2014 y 2018. En base a las tramas presentadas, la autora ahonda con sentido literario y con mucho sentimiento, en los secretos y misterios de las tierras que rodean al río Tigris, el descubrimiento y la interpretación de la escritura cuneiforme, y la cruel vivencia de los zayidíes, un grupo étnico y religioso localizado en territorio iraquí, objetivo de múltiples persecuciones a lo largo de su historia. » seguir leyendo
Estamos en el Peloponeso, en los albores del siglo VI a. C., o los últimos estertores del VII quizá (una cómica imagen, la de los ronquidos de todo un siglo, que tanto se adecúa a esta novela). Algo muere y algo nace en toda Grecia, y al mismo tiempo todo continúa. Qué paradoja, normal que apareciera gente como Parménides y Heráclito. Es la época de los tiranos, de los sabios, de las reformas, es el germen de lo que será la Grecia Clásica, es el fruto de lo que durante tantos siglos fue el Egeo: un enorme patio de vecinos abierto al resto de la ciudad. Aún no ha llegado Plauto y los romanos a la escena, en breve primará Aristófanes, así que nuestro La que se avecina será más contenido, más griego, más italiano de postguerra, más español berlanguiano, más coreano… más peninsular. Porque esa visión mundana y ridícula de los hombres, ese cúmulo de torpezas, poses impostadas y contradicciones que somos, baña toda esta novela, donde los conflictos no dejan de ser amables; el amor, contingente; risueños son los problemas y hasta la crueldad te genera la media sonrisa. » seguir leyendo
Hace un par de años, movido por la nostalgia histórica además de la cinematográfica procedí a visitar la ciudad de Zamora, localidad que por desgracia y por avatares de la vida todavía no había tenido ocasión de hollar. El primer motivo es obvio para cualquier amante de la literatura y de la Historia, pero en cuanto a la segunda, a la relacionada con el Séptimo Arte, era una deuda pendiente que tenía desde hacía muchos muchos años. Dejen que me explique: siempre –ahora también- me han gustado las películas históricas, sobre todo aquellas largas y antiguas que veía de pequeño en mi casa y que Televisión Española echaba en Semana Santa o Navidad y que, aunque algunas fueran de cartón piedra y gestos impostados, removían el magín de mi joven imaginación. Una de aquellas super producciones es, sin duda alguna, El Cid (Anthony Mann, 1961) y de ella recuerdo que una de las escenas más memorables -entre otras muchas- era la del cerco al que Sancho II sometió a la ciudad de Zamora y en la que el traidor (o salvador) Bellido Dolfos asestó una puñalada traidora al rey castellano en una de las puertas o postigos ocultos que había en sus murallas. » seguir leyendo