Taberna Hislibreña

[Calamus]

Hola Cali:

Gracias por compartir el origen tan simpático de tu nombre. Calamus es una palabra en latín. Era un instrumento que usaban los romanos para escribir sobre papiro o pergamino, una caña afilada que mojaban en tinta y que se seguiría usando hasta la edad media hasta que se sustituyó por la pluma de las aves, más fácil de conseguir y de manejar.

[Garnata]

Hola, Calamus.

Para mí también es un honor poder estar en tu lista.
Gracias por todo:)

[Likine]

Ya quisiera yo ser Gran Maestre, mi señora doña Cali, pero no llego ni a oblato ni a hermano lego sin votos.

[Pero Lopez]

13. Teoría de la divinidad material de la mente

En mi caso soy Cali porque de chica mis padres no paraban de decir que aunque nací en Argentina, había sido engendrada en California. De hecho, alardeaban con eso, como si engendrar gente en California fuera la gran cosa. Yo recién empezaba a hablar y, por supuesto, no tenía ni idea de lo que significaba todo eso, pero repetía "Cali" "Cali" porque el fornia no me salía. Así que mi abuelo me empezó a decir Cali y después ya todo el mundo. Recién empecé a usar mi nombre real cuando fui a la escuela.

[Calamus]

Ya que estás, por aquí, Pero Lopez, aprovecho para decirte que tu relato El Geómetra me gustó mucho y me hizo reír un montón. Como puedes ver ha pasado a mi carpeta por el manejo que haces en él del humor, un recurso nada fácil.
Y al hilo de eso, me he acordado de aquella ocasión que contabas en que un relato tuyo que había quedado tercero en la votación de la plebe no entró en la antología. Yo soy nuevo en este concurso y ahora me doy cuenta de cómo cambian las cosas con la votación de los Aristarcos. No ha sido mi caso, pero por ejemplo el relato de La segunda elección de Tiberio será publicado porque quedó segundo. Un relato que en opinión general ha gustado y ha sido votado como El Hijo, en cambio, no ha entrado. Otro como El sueño (de Franz Marc) o El último aria, que habían quedado en los puestos 17 y 21 respectivamente pasan a ser segundo y tercero.
Todo esto no es una crítica, sino un comentario sobre cómo me ha sorprendido la mecánica del concurso. Qué curioso.

[Akane]

¿Este año no se ha desvelado ningún aristarco? Humm... supongo que se ha habrá perdido la costumbre de enviarles jamones y demás.

[Calamus]

Pero Akane, si te lo envié certificado. Y pata negra gran reserva. Y además con una caja de Vega SIcilia como dijimos.
Estos de la mensajería son un desastre

Desde luego que conmigo los de la denominación de origen de Guijuelo se están haciendo de oro

[Akane]

[maqroll]

No tengo muy claro si es este el lugar donde uno se desprende del antifaz, pero me parece el más adecuado: entre cañas de cerveza, tientos a la bota de vino con berenjenas de Almagro, o jamón en cualquiera de sus denominaciones de origen. Maqroll es el alias bajo el que se ocultaba Don Luis, autor de los relatos Mi cardenalito y Fandango. Es un honor haber participado un año más (en ocasiones anteriores lo hice bajo el alias de Ilona) en este baile de máscaras que representa el concurso donde, por fortuna, los participantes revelan antes su emoción e intenciones respecto a los relatos ajenos que su rostro.

Releyendo esta tarde los comentarios a alguno de estos, siento que con algunos se me ha ido la mano, solo intentaba ser lo más sincero y honesto posible. Pido disculpas a aquellos que puedan haberse sentido ofendidos, pues no era esa mi intención. Igual que me disculpo con los autores de aquellos relatos que no pude terminar de leer, muchos de los cuales gustaron a otros lectores, forma parte del carácter del concurso.

Vaya mi felicitación para los premiados y también para aquellos que han logrado un hueco en la antología, tanto en cortos como en largos; así como para todos los que no han entrado en ese selecto club de antologizados (¡nada menos que 164!) y algunos de los cuales merecerían haber estado por derecho y buen hacer. Considero que el trabajo de los Aristarcos es francamente complicado.
Enhorabuena a todos los participantes y, sobre todo, a la dirección del concurso por reflotarlo.
Nos emplazamos en el "Así se hizo", un complemento perfecto al concurso.
Gracias.

P.D.: Mi cardenalito, tiene la insensata intención de convertirse en novela y en ello trabajo a diario. Es por eso que el retorno que me habéis aportado con vuestros comentarios es para mí muy valioso. Gracias de nuevo.
Salud y buenas letras.

[EyloMarquez]

¡Enhorabuena, Maqroll! Eran dos relatos muy buenos y cuidados y seguro que la novela será estupenda también.

Por cierto, qué fue del Lagarto del Chagre?