Foro Primigenio de Hislibris

[Casio]

[¡Collejas a estribor!].
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Hay cierto placer en la locura que sólo el loco conoce.

[jaime]

Creo que no puede incluirse al nazismo ( más bien a sus acólitos) y al stalinismo ( más bien a Stalin) dentro de cualquier categoría, ya sea la traicióny o el valor, porque eso sería relativizar esos dos regímenes, y pensar que pueden ser objeto de juicio, positivo o negativo, como aquellos que puieran ocurrir en otros regímenes, por supuesto humanizados.
Un ejemplo, pienso que no puede hablarse de traición respecto de Patton como de Sttaunfenberg. Este último no actuó motivado por terminar con el sufrimiento de las víctimas del régimen al cual pertenecía, el atentar contra el amo sino negociar en mejores condiciones con los aliados para seguir la guerra contra Rusia, tal vez. Patton no era siervo de un régimen esclavista como el nazi o el soviético.
( Creo que también se sentiría orgulloso de mí George)_______________________________
No existe tierra al otro lado del Volga

[karateka]

[Eunate]

No encuentro palabras para comentar tu escrito Karateka. Horreur
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Mirando hacia arriba un poco a la derecha, justo en medio debajo del principal.

[Cuchufletas]

Qué esperabas, Eunate, con la cara de su avatar...

[karateka]

[tacito]

Uno de nuestros primeros reyes, el visigodo Ervigio. Para llegar a ser elegido rey según las costumbres gérmánicas, pues la monarquia visigoda era electiva, tenia que:
-pertenecer a la gente goda
-tener buenas costumbres
-No haber sufrido la pena infamante de la decalvación(el pelo era un signo de fuerza para los germanos)
-No haber vestido hábito monacal ni haber recibido la tonsura(calva en la coronilla que se les hacía a los monjes

Bien, pues este personaje, en el 680, suministró al rey Wamba un narcótico para dormirlo y vestirlo de monje y le practicó la tonsura. Al descubrir al rey en semejantes condiciones, la asamblea le destituyó y nombraron a Ervigio nuevo rey de los godos. No hace falta decir que no fue muy aceptado y que todo lo que legisló lo hizo a través de los Concilios de Toledo y practico una política de concesiones que ni en la actual precampaña... En resumen, un verdadero golpe de Estado encubierto por la legalidad

[Cuchufletas]

Qué surrealista. ¡Me encanta!

Me recuerda a aquel cuento de Woody Allen donde el peluquero de Hitler trata de quitarle el bigote. También había un plan en alguna obra de ficción para que a Fidel Castro se le cayera la barba, posibilidad que creo que de verdad la CIA se llegó a plantear (entre las muchas, algunas un poco raras, que pensó e intentó).

[Aretes]

Tácito, bienvenido, que con lo del apagón nos hemos quedado sin hacer los deberes.

(Es que hoy dedico el día a revisar todo el foro y me estoy riendo un rato...)
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Lo que más necesitamos en la vida es gratis y, además, no tiene precio

[CORCONTAS]

Bienvenido!
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He vueltoooo!

[Gadatas]

Bueno, bueno, pues yo aporto alguna nueva traición, como la del excelentísimo Antonio Pérez, hijo de Gonzalo Pérez y secretario de Felipe II, que la hizo bastante grande. Ocupó la secretaría de los asuntos atlánticos mientras que su homólogo Gabriel de Zayas lo haría en los Mediterráneos; por aquel entonces las dos grandes facciones las constituían por un lado los Eboli y por el otro el elemento Duque de Alba, cada uno representante de sus intereses propios y con muchas ganas de atraer al rey hacia una posición u otra.

Antonio Pérez pertenecía a la primera de estas facciones. Uno de los asuntos que más dividía a estos grupos en esos momentos era el qué hacer con los ya enervados Países Bajos; a finales de los 70 ocupó el cargo de gobernador el hermanastro del rey y Pérez ya empezó a pergeñar algunos improperios contra él, además de que junto a la princesa de Éboli, habían comenzado a intercambiar y vender los asuntos del Consejo de Estado al mejor postor. Pérez se valía en todo momento del influjo que ocasionaba en Felipe II quién, a su vez, le reconocía una inteligencia y capacidad de decisión considerables.

El secretario consiguió hacer que mataran a Escobedo, consejero personal de Juan de Austria (parece ser que éste podía aportar las pruebas suficientes para, primero, exculpar de toda sospecha a Don Juan y segundo, desenmascarar parte de las actividades de Pérez). Los historiadores no se ponen de acuerdo sobre si Felipe II intervino o dio su consentimiento al respecto (NOTA: ¿alguna idea vuestra a respecto?¿Alguna opinión?), pero sí es cierto que, una vez muerto Juan de Austria en 1578, sus papeles hicieron ver al rey los asuntos secretos de Pérez con la princesa de Éboli o al menos lo pusieron en sobreaviso sobre esta facción.

El resto supongo que es cosa sabida; el rey se sintió crecientemente traicionado y se iniciaron unos procesos de encarcelamiento y vigilancia, que se dilucidaron en 1590, cuando se le encerró en Madrid; escapó y acabó en Aragón, territorio bastante caldeado donde aumentó el sentimiento fuerista y lanzó un órgado entre tribunales de Castilla y Aragón por su persona. Fue divertido, porque quemaron una efigie suya en uno de los juicios que la Inquisición sostenía contra él (no porque fuera hereje, sino para tener legitimidad con el fin de sacarlo de Aragón y devolverlo a Madrid). Estuvo varias veces encarcelado y otras tantas escapó o lo dejaron escapar, hasta que en su huída cruzó Francia (donde se le recibió abiertamente) y lo mismo en Inglaterra, donde se dedicó a vender más retazos de información y a morir, como se suele decir, solo y abandonado en 1611.


En fin, ejemplo muy conocido, pero muy relevante en la corte de Felipillo y de este estilo, muchos en todas las cortes europeas. Y así abrimos más épocas traicioneras .