Registrado: 25 Mar 2007 Mensajes: 5306 Ubicación: Junto al río Thader
Publicado: Lun Oct 24, 2011 6:09 pmTítulo del mensaje:
Estos son los dos libros que me compré el sábado para que los autores de las II Jornadas de Novela Histórica en Murcia me los firmasen.
El de Justiniano tengo muchas ganas de leerlo y el de Banu Qasi tengo el primero así que tenía que hacerme con el segundo. _________________ Daría todo lo que sé por la mitad de lo que ignoro. Descartes
Registrado: 26 Ene 2009 Mensajes: 1727 Ubicación: Santiago, Chile
Publicado: Lun Oct 24, 2011 9:42 pmTítulo del mensaje:
Ser o no ser, todavía dudo con qué edición leer.
He encontrado comentarios no muy buenos de la edición de Modadori (Gala Arias), además que no está disponible. También con el comentario de Rubén he dudado por la de Aleph, y está el precio también .
De la edición de Porrúa encontré un comentario bueno...
Registrado: 13 Dic 2010 Mensajes: 2028 Ubicación: A bordo de la Halbrane
Publicado: Lun Oct 24, 2011 10:46 pmTítulo del mensaje:
Joer! Por fin he encontrado un puñetero libro de C. S. Forester. Y ha tenido que ser en la puñetera FNAC. Los que somos de pueblo y bajamos a la ciudad muy de cuando en cuando es lo que nos pasa, que no encontramos las cosas.
El guardiamarina Hornblower, primero de la saga. _________________ El que ha naufragado,
teme al mar aun calmado.
Registrado: 28 Nov 2007 Mensajes: 8545 Ubicación: Santiago de Chile
Publicado: Mar Oct 25, 2011 3:43 amTítulo del mensaje:
Ausente escribió:
Ser o no ser, todavía dudo con qué edición leer.
He encontrado comentarios no muy buenos de la edición de Modadori (Gala Arias), además que no está disponible. También con el comentario de Rubén he dudado por la de Aleph, y está el precio también .
De la edición de Porrúa encontré un comentario bueno...
Lo tengo que decidir en estos días...
Aparte la de El Aleph tengo un ejemplar de la edición hecha por Planeta en 2000. Me parece una buena traducción pero no es seguro que provenga directamente del ruso. Muy en contra: el volumen es de manejo incómodo y la letra, demasiado pequeña. La introducción, a cargo de Eduardo Mendoza, es más que correcta.
Hace un tiempo descarté la edición de Mondadori, Ausente, precisamente por los malos comentarios que encontré en la red. Una lástima porque está muy bonita.
Mientras tanto léete el ejemplar que tienes, compañero. Andrés Bello suele ser fiable en materia de traducciones aunque lo más probable es que en este caso sea una versión de alguna edición francesa.
… A propósito de ediciones bonitas: acabo de comprarme oootra de mis grandes favoritas: El doctor Zhivago en la edición de Galaxia Gutenberg/Círculo de Lectores. Traducción directa del ruso por Marta Rebón, la misma que tradujo Vida y destino con tan buenos resultados. Y hace poco me regalaron Crimen y castigo en la edición de Cátedra, cartoné con sobrecubierta muy bien ilustrada. (Buf, que emoción. ¡Cómo me chiflan estas novelas!)
Registrado: 28 Nov 2007 Mensajes: 8545 Ubicación: Santiago de Chile
Publicado: Mar Oct 25, 2011 3:46 amTítulo del mensaje:
Rubén G. Tuero escribió:
Yo estoy leyendo ahora precisamente la edición de Mario Muchnik. Como no sé ruso, no puedo detectar los errores de traducción, pero hay partes, sobre todo diálogos, que suenan muy forzadas y poco naturales en español. Mantiene los diálogos (muchos) que estaban en francés en el original, lo que está bien, pero lo que lo hace muy pesado es que la traducción de esas frases no está en notas al pie de página sino al final del libro, lo cual, en un tomo de más de 1800 páginas...
Yo no me fío mucho de las traducciones de este editor desde que leí una de las peores traducciones que he visto en mi vida en una novela de su editorial (traducción, qué coincidencia, firmada por alguien de apellido Muchnik). Es lo que hay....
Registrado: 26 Ene 2009 Mensajes: 1727 Ubicación: Santiago, Chile
Publicado: Mar Oct 25, 2011 3:59 amTítulo del mensaje:
Y de rusos, a la Antártica (Manantial) llegaron unas ediciones de editorial Alba, con muy buena pinta, eso sí yo ni conocia esa editorial. El único punto débil que les ví fue la calidad del papel interior y el precio excesivo.
Hasta ahora creo que voy a leer la que tengo, me he leído unas cuantas páginas y se dejan leer bastante bien. Aunque la verdad me tienta la edición de Aleph, de tratarse de una edición "definitiva", aunque tenga ese diseño de la sobrecubierta tan feo.
Registrado: 15 Oct 2006 Mensajes: 14984 Ubicación: Kallipolis
Publicado: Mar Oct 25, 2011 8:25 amTítulo del mensaje:
Pues estoy listo... Hace muy poco compré Guerra y paz en la editorial DeBolsillo, y la traducción es la misma que la de la editorial Mondadori. ¿Dices que es mala, Rodrigo?
Leí hace poco este artículo de Mario Muchnik, editor de El Aleph, sobre su edición de Guerra y paz:
Oculto:
Por qué una nueva traducción de Guerra y paz
por Mario Muchnik
Mario MUCHNIK | Publicado el 30/10/2003
Son múltiples y sustanciales las correcciones que hemos hecho en la nueva versión de Guerra y Paz. Para no hablar de los términos, frases y hasta párrafos lisa y llanamente desaparecidos. Ni de los contrasentidos, ni de los títulos alterados sin justificación
Desde hace más de cuatro años la gente me lo viene preguntando, al enterarse de que ando metido en proyecto tan desmesurado. La respuesta se divide en dos partes. Primero, porque así como ciertos editores colman sus aspiraciones profesionales editando la Biblia, editar Guerra y paz, una novela que leí a mis catorce años, que releí cinco veces más a lo largo de mi vida y que considero la mejor novela jamás escrita, colma mis propias aspiraciones de editor. Pero, en segundo lugar, porque, como lector, no logro hallar en librerías una edición completa y fiel al original. Suponía, con la mayor parte de mis amigos “asesores”, que la traducción de José Laín Entralgo y Francisco José Alcántara (Argos Vergara, 1979; reeditada por Planeta en 1998) era no sólo la mejor disponible sino una muy buena traducción.
Pero un día de mayo de 1999 me llamó mi traductora del ruso, Lydia Kúper, a quien había contratado como revisora, me invitó a su casa, me sirvió Vichy Catalán y me dijo algo así:
-La traducción de Laín se deja leer. Pero he encontrado algunos errores. Hay que corregirlos.
-Para eso hemos firmado un contrato- respondí. -Dame algún ejemplo.
Me miró con su sonrisa escéptica, se calzó las gafas, fue a la tercera página de la novela y me leyó la frase siguiente: “Inglaterra, con su espíritu comercial, no comprenderá ni podrá comprender nunca la pobreza de ánimo del emperador Alejandro”.
Alzó la mirada, se quitó las gafitas y me preguntó: -¿Qué te parece?
Esperó mi opinión, pero yo no la tenía.
-¿Te parece posible? Es Anna Pávlovna la que habla.
Ante mi silencio añadió: -Alejandro es el Zar. Me llamó la atención que una noble rusa se refiera tan luego a la pobreza de ánimo de su Zar.
-¿Qué hiciste?
-Consulté el original ruso y comprobé que Tolstói no pone en su boca eso sino todo lo contrario: la sublime altura moral del emperador Alejandro, no la pobreza de ánimo.
-¿Qué dicen las otras traducciones?
Me refería a las traducciones italiana, francesa e inglesa, de las que había entregado a Lydia sendos ejemplares.
-La altura, la altura, las tres dicen la altura moral.
-Pero ¿por qué crees que Laín y Alcántara pusieron lo contrario?
Esta vez fue ella quien guardó silencio. Nos miramos y comenzamos a reírnos.
-¿Cuestiones políticas, crees?- le pregunté, pensando que en el Moscú soviético, donde Laín había trabajado, tal vez no cayera bien un elogio al Zar.
-No creo- dijo. Pero no sé por qué puso la pobreza en vez de la altura moral. ¿Descuido?
-¿Hay más?, le pregunté luego.
-Mucho más, aunque hasta la tercera página esto es lo más llamativo. Y es inexplicable.
Las correcciones “gordas” fueron muchísimas más de lo que entonces preví. Y ello hasta la última página de la novela: al final de uno de los últimos párrafos del Epílogo, antes del Apéndice, la traducción de Laín y Alcántara dice “Esa unidad, en la astronomía, era la inmovilidad de la tierra; en la historia es la independencia del universo, la libertad”; pero Tolstói dice: “en la historia es la independencia del individuo, la libertad”. ¿Por qué Laín y Alcántara ponen universo en lugar de individuo?
Y eso para no hablar de la cantidad de términos, frases y hasta párrafos lisa y llanamente desaparecidos. Ni de los contrasentidos que nacen de errores de sintaxis; ni de los títulos alterados sin la mínima justificación: príncipe por conde, general por coronel; ni de los posesivos ambiguos, esos “su” que no se sabe si se refieren al sujeto o al predicado.
El trabajo de Lydia, auténtica nueva traducción del ruso, completa y fiel al original, se prolongó mucho -de hecho Lydia no puso punto final sino a fines de agosto de 2003. Y ello después de haber hecho una segunda ronda de correcciones. Para ello me pidió autorización: la relectura, me dijo, le había permitido comprender que había sido demasiado indulgente, sobre todo al principio. Y sus segundas correcciones resultaron ser casi tantas como las primeras. De mayo de 1999 a agosto de 2003, son más de cuatro años, cuatro años durante los cuales Lydia y yo estuvimos sumergidos en el universo de Tolstói, reviviendo a la vez la narración y nuestras lecturas de la narración, descubriendo de ese modo detalles minúsculos del genio del autor: maravillándonos de su idioma robusto, audaz; estremeciéndonos ante su conocimiento del alma humana; hallando explicaciones recónditas pero explícitas de muchas actitudes, gestos y hasta sueños de muchos personajes, explicaciones que, en una lectura normal, pasan desapercibidas.
Consciente de esta calidad de la novela, quienes hemos trabajado en este proyecto (y quienes lo han hecho materialmente posible: el Ministerio de Cultura y un grupo de “amigos de Guerra y paz”) hemos hecho bastante más de lo habitual para lograr una edición capaz de sobrevivir muchos años. Como gusta decir Lydia Kúper: hemos puesto “toda el alma” en el trabajo.
Pero es que El Aleph vale cuatro veces más que DeBolsillo, y por eso me decidí por esta última. Y ahora resulta que tendré que darle la razón a mi mujer en aquello de que lo barato sale caro... _________________ Otros pueblos tienen santos, los griegos tienen sabios.
Friedrich Nietzsche
La vida solo puede ser comprendida mirando atrás, pero solo puede ser vivida mirando adelante.
Søren Kierkegaard
Registrado: 28 Nov 2007 Mensajes: 8545 Ubicación: Santiago de Chile
Publicado: Mar Oct 25, 2011 3:52 pmTítulo del mensaje:
cavilius escribió:
Pues estoy listo... Hace muy poco compré Guerra y paz en la editorial DeBolsillo, y la traducción es la misma que la de la editorial Mondadori. ¿Dices que es mala, Rodrigo?
Leí hace poco este artículo de Mario Muchnik, editor de El Aleph, sobre su edición de Guerra y paz:
Oculto:
Por qué una nueva traducción de Guerra y paz
por Mario Muchnik
Mario MUCHNIK | Publicado el 30/10/2003
Son múltiples y sustanciales las correcciones que hemos hecho en la nueva versión de Guerra y Paz. Para no hablar de los términos, frases y hasta párrafos lisa y llanamente desaparecidos. Ni de los contrasentidos, ni de los títulos alterados sin justificación
Desde hace más de cuatro años la gente me lo viene preguntando, al enterarse de que ando metido en proyecto tan desmesurado. La respuesta se divide en dos partes. Primero, porque así como ciertos editores colman sus aspiraciones profesionales editando la Biblia, editar Guerra y paz, una novela que leí a mis catorce años, que releí cinco veces más a lo largo de mi vida y que considero la mejor novela jamás escrita, colma mis propias aspiraciones de editor. Pero, en segundo lugar, porque, como lector, no logro hallar en librerías una edición completa y fiel al original. Suponía, con la mayor parte de mis amigos “asesores”, que la traducción de José Laín Entralgo y Francisco José Alcántara (Argos Vergara, 1979; reeditada por Planeta en 1998) era no sólo la mejor disponible sino una muy buena traducción.
Pero un día de mayo de 1999 me llamó mi traductora del ruso, Lydia Kúper, a quien había contratado como revisora, me invitó a su casa, me sirvió Vichy Catalán y me dijo algo así:
-La traducción de Laín se deja leer. Pero he encontrado algunos errores. Hay que corregirlos.
-Para eso hemos firmado un contrato- respondí. -Dame algún ejemplo.
Me miró con su sonrisa escéptica, se calzó las gafas, fue a la tercera página de la novela y me leyó la frase siguiente: “Inglaterra, con su espíritu comercial, no comprenderá ni podrá comprender nunca la pobreza de ánimo del emperador Alejandro”.
Alzó la mirada, se quitó las gafitas y me preguntó: -¿Qué te parece?
Esperó mi opinión, pero yo no la tenía.
-¿Te parece posible? Es Anna Pávlovna la que habla.
Ante mi silencio añadió: -Alejandro es el Zar. Me llamó la atención que una noble rusa se refiera tan luego a la pobreza de ánimo de su Zar.
-¿Qué hiciste?
-Consulté el original ruso y comprobé que Tolstói no pone en su boca eso sino todo lo contrario: la sublime altura moral del emperador Alejandro, no la pobreza de ánimo.
-¿Qué dicen las otras traducciones?
Me refería a las traducciones italiana, francesa e inglesa, de las que había entregado a Lydia sendos ejemplares.
-La altura, la altura, las tres dicen la altura moral.
-Pero ¿por qué crees que Laín y Alcántara pusieron lo contrario?
Esta vez fue ella quien guardó silencio. Nos miramos y comenzamos a reírnos.
-¿Cuestiones políticas, crees?- le pregunté, pensando que en el Moscú soviético, donde Laín había trabajado, tal vez no cayera bien un elogio al Zar.
-No creo- dijo. Pero no sé por qué puso la pobreza en vez de la altura moral. ¿Descuido?
-¿Hay más?, le pregunté luego.
-Mucho más, aunque hasta la tercera página esto es lo más llamativo. Y es inexplicable.
Las correcciones “gordas” fueron muchísimas más de lo que entonces preví. Y ello hasta la última página de la novela: al final de uno de los últimos párrafos del Epílogo, antes del Apéndice, la traducción de Laín y Alcántara dice “Esa unidad, en la astronomía, era la inmovilidad de la tierra; en la historia es la independencia del universo, la libertad”; pero Tolstói dice: “en la historia es la independencia del individuo, la libertad”. ¿Por qué Laín y Alcántara ponen universo en lugar de individuo?
Y eso para no hablar de la cantidad de términos, frases y hasta párrafos lisa y llanamente desaparecidos. Ni de los contrasentidos que nacen de errores de sintaxis; ni de los títulos alterados sin la mínima justificación: príncipe por conde, general por coronel; ni de los posesivos ambiguos, esos “su” que no se sabe si se refieren al sujeto o al predicado.
El trabajo de Lydia, auténtica nueva traducción del ruso, completa y fiel al original, se prolongó mucho -de hecho Lydia no puso punto final sino a fines de agosto de 2003. Y ello después de haber hecho una segunda ronda de correcciones. Para ello me pidió autorización: la relectura, me dijo, le había permitido comprender que había sido demasiado indulgente, sobre todo al principio. Y sus segundas correcciones resultaron ser casi tantas como las primeras. De mayo de 1999 a agosto de 2003, son más de cuatro años, cuatro años durante los cuales Lydia y yo estuvimos sumergidos en el universo de Tolstói, reviviendo a la vez la narración y nuestras lecturas de la narración, descubriendo de ese modo detalles minúsculos del genio del autor: maravillándonos de su idioma robusto, audaz; estremeciéndonos ante su conocimiento del alma humana; hallando explicaciones recónditas pero explícitas de muchas actitudes, gestos y hasta sueños de muchos personajes, explicaciones que, en una lectura normal, pasan desapercibidas.
Consciente de esta calidad de la novela, quienes hemos trabajado en este proyecto (y quienes lo han hecho materialmente posible: el Ministerio de Cultura y un grupo de “amigos de Guerra y paz”) hemos hecho bastante más de lo habitual para lograr una edición capaz de sobrevivir muchos años. Como gusta decir Lydia Kúper: hemos puesto “toda el alma” en el trabajo.
Pero es que El Aleph vale cuatro veces más que DeBolsillo, y por eso me decidí por esta última. Y ahora resulta que tendré que darle la razón a mi mujer en aquello de que lo barato sale caro...
Cavilius, dado que no la conozco no puedo opinar sobre la traducción de Mondadori. Puesto a elegir entre varias ediciones disponibles, opté por la de El Aleph por ser la que tiene mejores referencias en la red, mientras que en el mismo medio la de Mondadori concita críticas muy duras. Un par de ejemplos:
Cita:
No quiero cerrar esta ya larga reseña sin dejar constancia de la pésima traducción de Mondadori, a cargo de Gala Arias Rubio, y de la necesidad de que ésta y otras editoriales cuiden más sus ediciones. Permitidme que usurpe el papel del Consumidor Irritado, para decir indignada que no está de más pagar a un corrector de estilo y a otro ortotipográfico que pulan los textos, de manera que éstos no sean una ofensa para el lector. Más aun cuando no es esta una edición de bolsillo, antes al contrario, por lo que creo que un poquito de calidad es perfectamente exigible.
Leed “Guerra y paz”. Pero buscad una edición que no sea la de Mondadori, pues la pésima traducción hace que se pierda mucha de la belleza de sus páginas.
De entre las modernas, alguien me regaló, con toda la buena intención del mundo, la de Mondadori, porque es muy bonita y, a pesar de su volumen, pesa poco. Y no me extraña, porque se han pulido todo lo que les sobraba. Está llena de errores (no de traducción –no lo sé-, sino de redacción y de composición) y la prosa me resulta forzada y pobre.
Mira por dónde, la traducción que critica Muchnik –de Laín y Alcántara- es justamente la que conozco y que comentaba arriba (en la adolescencia leí otra versión, no recuerdo de qué editorial). Resulta ahora que es bastante defectuosa, diantre.
Registrado: 15 Oct 2006 Mensajes: 14984 Ubicación: Kallipolis
Publicado: Mar Oct 25, 2011 4:15 pmTítulo del mensaje:
Vaya, para una vez que me decido a leer un clásico con menos de 2500 años...
Gracias, Rodrigo. En fin, tendré que apechugar y leer la que tengo, quizá (ojalá) no sea tan farragosa como la pintan. Si me cuela errores de traducción no me voy a enterar, desde luego, pero creo que los tiros van más bien en el sentido de que el texto no tiene gracia ni viveza, que no sé si es peor.
Bueno, Rodrigo, puede que los errores que comenta Muchnik sobre la traducción de Laín/Alcántara fueran, como él mismo comenta, "forzados" por las circunstancias (aunque seguirán siendo errores al fin y al cabo). En cualquier caso, a menos que uno sepa ruso y pueda leer el original, cualquier traducción podrá colarnos goles sin que nos demos cuenta.
Esto de que cada país tenga un idioma diferente es un rollo. Echémosle la culpa a Babel y su torre... _________________ Otros pueblos tienen santos, los griegos tienen sabios.
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La vida solo puede ser comprendida mirando atrás, pero solo puede ser vivida mirando adelante.
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