Novedades libros de Historia – 19 noviembre 2006
3 novedades de La Esfera de los Libros para este mes de noviembre:
– Maestros de la República: Los otros santos, los otros mártires, de María Antonia Iglesias.
– 40 preguntas fundamentales sobre la Guerra Civil, de Stanley G. Payne.
– Don Jaime, el trágico Borbón: La maldición del hijo sordomudo de Alfonso XIII, de José María Zavala.
El de Don Jaime lo estuve ojeando, ya había leido algo en Balansó sobre el personaje, y me sorprende como su vida puede dar para todo un libro…Supongo que tendrá una tipografía enorme.
No he tenido oportunidad de ojear ninguno de los tres mencionados, pero si tuviera que interesarme por alguno de ellos tal vez lo haría por el de María Antonia Iglesias; creo sinceramente que la II República se había planteado muy seriamente el tema de la educación en España, intentando abarcar el máximo de población a su acceso, de ahí que pueda resultarme ciertamente interesante la labor de este profesorado en esa tan grande iniciativa.
Un saludo.
Sin embargo el gran salto de la educación en España se había producido antes, como señala Ramón Tamamés, en la época del Directorio de Primo de Riverda, con un aumento del 50% del presupuesto educativo, y un aumento de 30.000 a 34.000 profesores en solo 4 años, y de 6.000 escuelas nuevas como saldo final de su actividad, política que fué continuada como hecho natural por la República ( Como muchas de las del Directorio, que luego se atribuyó como propias en palabras del propio Tamamés), aunque el saldo no fué netamente positivo, ya que las trabas impuestas a los colegios religiosos, determinaron que el número de escuelas de secundaria se mantuviese estable, en lugar de aumentar.
Es decir, la IIª República si pudo estar realmente interesada en la difusión de la enseñanza, pero más aún en que esta fuese una enseñanza próxima a los valores del nuevo modelo de estado.
Primo de Riverda…Estoy yo bueno. Primo de Rivera.
La foto está bien, pero no es para tanto, qué creidillo.
Hay que ver…
Interesante punto el que has tocado Urogallo sobre la orientación que la República quería dar a la Educación. Seguramente, este libro se centra de lleno en esa nueva hornada de profesores que querían realizar toda una revolución educativa basado en los ideales republicanos; marcados éstos claramente por un laicismo y un acercamiento de la cultura a las clases más desfavorecidas de la sociedad.
Un saludo.
Estoy de acuerdo en la primera parte, se trataba de un enfoque nuevo de la educación, al margen del binomio catecismo católico/instrucción existente hasta la fecha, pero que los sustituía por el catecismo repúblicano con sus propios valores.
En la segunda parte, no puedo estar de acuerdo, citando siempre a Tamamés ( Que ha descubierto la forma de escribir usando sólo gráficos), la intención clara de la política educativa del Directorio era extender la educación a las clases bajas para proporcionar obreros especializados a la prevista industrialización. (Curioso, Vicente Talón exponía en su día la utilidad de estos programas educativos en la URSS para lograr un ejército de leva «mecánico»).
En ambos casos, me temo, la instrucción en sí misma, como un valor integral, era un aspecto secundario.
Bueno, sin entrar en el debates sobre su origen, sí quisiera comentar algo de la política educativa republicana que me llamó mucho la atención hace un par de años. Estando en Barcelona, tuve la oportunidad de visitar una exposición de carteles de la guerra civil de ambos bandos. Me pareció muy significativo que en plena guerra, el bando republicano dedicase tiempo y dinero a campañas de alfabetización ciudadana, muchos de cuyos carteles estaban allí expuestos. Desde mi punto de vista, es algo muy meritorio.
Saludos.
Está claro que cualquier proyecto que intente transformar la realidad necesita comenzar por la educación. Por eso no resulta extraño que la educación de la clase obrera fuese objetivo prioritario para quienes aspiraban a hacerlo. El anarquismo, por ejemplo, hizo del acceso a la cultura y a la educación una de sus banderas, y hay muchos carteles propagandísticos realmente curiosos (obrero sal del bar, olvida el burdel y lee, etc.) que supongo que son como los que comentas, Germánico. Es muy loable, pero es obvio que el objetivo no es otro que lograr que un cierto tipo de educación dé paso a un cierto tipo de sociedad. Normal.
Creo que el prestigio de la educación en la República viene de su asociación con la Institución Libre de Enseñanza y el krausismo del XIX, y por eso es muy interesante lo que apunta Urogallo (¿qué venía de antes y qué era puramente republicano?¿qué había de libertad y qué de adoctrinamiento?). Se habla mucho de La Barraca, pero al margen de sus intenciones (una vez más, loables) tengo entendido que sus frutos fueron relativos, supongo que por su corta vida. Hablando de exposiciones, hace un par de años hubo una acera de este tema en la residencia de estudiantes de Madrid, en la que vi una imagen de La Barraca dando a conocer Las Meninas y otras glorias patrias en un patio de corrala, realmente memorable. Y significativa: voluntarismo, filantropía…y demasiadas prisas.
Saludos
Uno de los cuentos de Manuel Rivas trata de la relación entre un niño y su maestro, en un pueblo gallego, durante la II República y el inicio de la Guerra Civil. El despertar de la curiosidad por la naturaleza del niño, el cariño entre éste y el maestro (algo casi impensable en la época en que vivimos), el trágico final, componen un hermoso relato. El título del libro de cuentos es Qué me quieres amor y el del relato estoy seguro de que ya lo habréis adivinado.
Un saludo,
Pepe.
Y ¿alguien ha ojeado el libro de Payne? Porque me extraña que ninguno de los especialistas de hislibris diga nada sobre un autor tan conocido como recientemente vapuleado…
Estoy pendiente de leerme su último libro publicado sobre la República: «EL COLAPSO DE LA REPÚBLICA», creo que a pesar de las críticas que está recibiendo Payne desde un sector de la izquierda puede que sea un libro interesante para conocer el último tramo de la historia de la II República. En cuanto a este mecionado en el post, me da la espina que es una aportación de cara a la galería. Tal vez esté siendo un poco atrevido al calificar un libro si haberlo leído, pero de entrada el título no me atrae nada de nada……
Un saludo.
En cuanto a la biografía del segundo hijo del Rey Alfonso XIII, pues.. ¿qué decir? pues..que no me dice nada. No es un libro que me llevaría a casa. Creo que el personaje no da tanto de sí como para pensar que pudo haber sido un personaje decisivo, o por lo menos con la suficiente importancia como para dedicarme al estudio de su vida en general a través de este libro.
Un saludo.
Como ya dije, a Balansó le costaba encontrar datos suficientes sobre Don Jaime para llenar un capítulo de uno de sus libros…Y eso que escribía desde la admiración de un antiguo legitimista «jaimista».
Una obra destinada al mercado del cotilleo histórico, nada más.