Foro de Hislibris

Lucie escribió: ↑Jue Feb 13, 2025 9:12 pm Eso venía a decir, en esa foto no salgo, aunque éste fue justamente mi primer encuentro. Lo fantástico, fue esa sensación de conocernos desde hacía muchos años, cuando era la primera vez que nos veíamos.

Tú llegaste el sábado. La foto es del viernes.

Sí, sí, me acuerdo perfectamente de que estabas, Lucie, y bien guapa sales en otras fotos, que por algún sitio he de tener guardadas además seguro.

Y qué guay, tal cual dices, es que es eso: recuerdo también los que creo que fueron los primeros encuentros, y estar hablando con Nau(sícaa) en el restaurante, porque nos acabábamos de conocer ese día como casi todos los presentes, y ella flipando también por esto mismo, jaja… Encima, yo no llevaba aún mucho tiempo en Madrid, qué tiempos, y aunque desde el principio tuve la suerte de buena gente, pues encontrarme con aquello (o sea, con esto ) fue la guinda...

Por cierto, que hace un ratillo comentaba justo con Íñigo por la otra línea que nos veremos ya otra vez en nada como quien dice (junio está aquí al lado... Más o menos), ¡y con ganas de conoceros también a las incorporaciones que ha traído este nuevo certamen!

Ay, Magnus, que nos hemos entrecruzado.

Claro, tienes razón... ¡Qué buena memoria!

De lo poco bueno que se puede aprovechar de mí. Sí que tengo buena memoria, sí.

Pero ya tengo curiosidad, si salís todos o prácticamente todos en la foto, ¿entonces quién la hizo?

Txema no está en la foto y ese día sí estaba. Y lo mismo Atenea. Igual alguno de ellos.

Yo solo he podido asistir a un acto hislibreño, la presentación del libro de la VIII edición en una de las salas del Centro Cultural del Matadero, en Madrid. Fue un verdadero placer conocer a tanta gente buena de la que solo sabías su nick del concurso. Aquí abajo pongo la única foto que tengo del evento. Yo soy el extremo derecho.
https://ibb.co/pBqnRxfc

El pasado julio, mi mujer y yo acudimos unos días al 47 Festival de Teatro de Almagro. Era la primera vez, y fue una experiencia memorable. Asistimos a tres obras —¡en tres teatros diferentes!—, a cuál mejor. En la bellísima plaza Mayor nos cruzamos con la actriz Marisa Paredes, que en paz descanse; con Lluís Omar en la heladería Fresquibiri (solo por el nombre estaría dispuesto a abrir una franquicia en mi ciudad; este verano, lo negocio ), entonces director del TCN. Este año planeamos repetir, y, si es posible, asistir a más representaciones —la economía se impone: hay que alojarse, comer, etcétera—. Salvo por el sofocante calor, (comprendimos a la perfección por qué las obras se representan tarde: 21.30-22.00), resultó un plan formidable. Desayunar, leer (o releer, esta vez con verdadero interés, no como en el bachillerato) media obra; salir a la compra, tomar el vermú, comer en casa, dormir la siesta (obligatoria, con esas temperaturas no existe plan mejor); leer la mitad restante de la obra, atesorar toda la información posible para ir a la representación “estudiao”; ponerse guapos y frescos, cenar en la plaza, comentarla la obra y, ya en la sobremesa, echar un vistazo discreto para ver al elenco… vivir, son placeres adultos y civilizados. Cosas de groupie.
Os cuento todo este rollo porque la fotografía que Magnus ha colgado —y los comentarios posteriores— me ha evocado esa sensación: la de sentirte a gusto “entre los tuyos”. Como cantaba el gran Javier Krahe, ay, que en paz descanse también, “no todo va a ser follar”.
Al veros tan jóvenes, guapos y entusiastas, entre don Quijote y Sancho, frente a la casa de Cervantes, me vino a la memoria otra “frikada de groupie” a la que también tuvimos el placer de asistir en Almagro. Mientras visitábamos el Corral de Comedias —para este no conseguimos entradas—, desde uno de los palcos, vimos a cuatro mujeres separarse de sus maridos —ellos sonreían y grababan móvil en mano— y comenzar a representar un fragmento de una obra clásica a pie de escenario, frente al patio de butacas. Lo hicieron con tal mezcla de pasión, transgresión, apremio y excitada timidez que nos dejó boquiabiertos. Al rematar, se aplaudieron a sí mismas, aplaudieron sus maridos (más les valió) y nos sumamos al aplauso.
Nos pareció un maravilloso acto de camaradería, civismo y amor por lo que uno hace. Tenga éxito, o no.
Lo mismo ocurre todos los años, pero a nosotros nos pareció muy especial.
Salud y gracias, Magnus.

Almagro, reserva espiritual de la Mancha (sobre todo las berenjenas).

De nada, Maqroll.
Este año he disfrutado muchísimo del concurso.
Con todos vosotros.
Las gracias las doy yo.