Estamos en el Japón de comienzos del siglo XVII. El shōgun, Tokugawa Ieyasu, dirige los destinos de un país unificado bajo su mando. Sin embargo, los rescoldos de la guerra civil que tantos años ha consumido las islas siguen aun calientes. El país parece agitado por rumores que cuentan desde las sombras que los seguidores del depuesto Hideyori podrían estar tramando derrocar al nuevo gobierno.

Miyamoto Tsunetomo es el maestro de esgrima e Investigador de Asuntos Especiales del clan Date -uno de los más fieles apoyos de los Tokugawa, liderado por el famoso general Masamune, el Dragón tuerto-. Lo acompaña su joven discípulo e hijo adoptivo Aki, quién es el verdadero protagonista de la historia y narrador de ella, hablándonos en primera persona desde varias décadas después de los hechos, aunque es cierto que a veces narre escenas en las que no estaba presente en ese momento; quizás supo que ocurrió o se dijo en ellas tiempo después. Junto a ellos viajará también el mejor amigo de Aki, Ichiro, y todos se verán envueltos en investigaciones donde la los magia negra y espíritus malignos los acecharán junto a la mayor amenaza de todas: el hombre, sobre todos aquellos ambiciosos y sin escrúpulos, capaces de cualquier cosa para alcanzar sus objetivos. Y es que en el universo literario del Japón de Carlos Bassas los malos espíritus, los fantasmas, los demonios, los yokai y los oni pueden manifestarse y son tan reales -y letales- como el acero de las espadas samuráis. 

Esta es la ambientación general donde nos veremos inmersos al leer estas novelas, inmersión favorecida por un estilo ligero pero detallado, rico en matices, donde también aprenderemos diversos términos japoneses -aunque a veces hay tantos que pueden llegar a entorpecer la lectura en algún momento, ya que debes dirigirte al “Akiglosario” situado al final del libro para saber que significan, e incluso yo, que no soy un principiante en el Japón de los samuráis, me he encontrado en algún momento yendo y viniendo al glosario-. La narración tiene un estilo fresco y ágil, con un toque de literatura juvenil, y mezcla perfectamente lo histórico y lo fantástico, tanto en la ambientación como en el propio desarrollo de la trama y los sucesos reales que están ocurriendo en Japón en esos conflictivos años: Encontraremos escenas de la vida cotidiana, tanto de los samuráis como de las clases más bajas, sabremos como era la sociedad de la época y correremos aventuras y lucharemos por nuestras vidas junto a los protagonistas en dos novelas de lectura realmente amena. Poco más se puede pedir.

Con respecto al primer título que abre la saga, “Aki y el misterio de los cerezos”, debo decir que hacía mucho tiempo que no leía una novela de una tacada en el mismo día y ha tenido que llegar ésta para romper esa mala racha. Así, tenemos una presentación, una especie de capítulo piloto, donde conoceremos a los protagonistas, el mundo en el que viven y a sus enemigos, asentando ya la base “fantástica” que acompañará al resto de la saga, dejándonos así preparados para las siguientes aventuras.

En una novela breve -poco más de 200 páginas- los personajes están bastante bien presentados con algunas pinceladas, aunque -o al menos, eso me ha parecido- reúnan algunos clichés del género: El hábil maestro, letal espadachín de pasado tormentoso; el joven e ingenuo protagonista que se va curtiendo en su viaje iniciático en la lucha contra el mal, y su bonachón pero decidido mejor amigo. Un poco como un Gandalf/Aragorn guiando a Frodo y a Sam. Pues bien, pese a lo que podáis pensar, los personajes funcionan, y mucho, y no se tarda en cogerles cariño, acabando uno el libro con ganas de seguir sabiendo más de ellos.

La segunda novela, “El misterio de la gruta amarilla”, ha sido editada recientemente por Quaterni. Posiblemente es el libro mejor editado de todos los que poseo de la susodicha editorial: Excelente diseño de portada y contraportada -y ya me gustó la anterior, con un pequeño relieve-, con unas texturas que da gusto tocar y un papel de buena calidad que hace parecer incluso más gruesa de lo que realmente es. Además, no he encontrado ninguna errata, como sí me ha ocurrido otras veces con títulos de Quaterni; un trabajo realmente excelente. Por poner un punto negro en la escritura, decir que me encontré la expresión “dejar KO” durante un combate, la cual me sacó un poco de la lectura al resultarme demasiado moderna y anglosajona para que la use un japonés del siglo XVII (aunque, en el fondo, se supone que estaríamos leyendo una traducción de lo que él pone por escrito, pero aun así rechina).

A lo largo de sus capítulos, los protagonistas deben investigar la desaparición del cazador de fantasmas del mismísimo shōgun Tokugawa. Tras las pesquisas iniciales, descubren que varios campesinos y un niño están también desaparecidos. Un mapa oculto hallado entre las pertenencias del agente del shōgun los alerta sobre un misterioso lugar en las montañas cercanas que podría ser la clave del misterio: La gruta amarilla.

Al igual que en el primer título, la lectura es adictiva, y acabé con ella en sólo tres días -teniendo en cuenta que tiene casi 100 páginas más que la anterior- y mantiene el interés del lector con el “que pasará” en el siguiente tomo gracias a un giro narrativo bastante efectivo al final. Además, puede leerse independientemente, ya que cuando necesitamos recordar algo de lo ocurrido en el primer título lo encontramos muy bien resumido -aunque claro, si lo has leído mejor-.

Si os gusta la novela de aventuras, el mundo de los samuráis, Japón o la literatura juvenil con un toque adulto (o la novela con un toque juvenil), los libros de Aki de Carlos Bassas son lecturas que no deberíais dejar pasar. Destilan el amor y el conocimiento que el autor tiene sobre la época, y no podría ser de otra forma ya que él mismo práctica diversas artes marciales, entre ellas el iaidō, relativa a la esgrima japonesa. Y si os enganchan tanto como a mí, os alegrará saber que el autor está ya trabajando en el tercer volumen. Parece que hay Aki para rato. Y yo que me alegro.

Título: Aki y el misterio de los cerezos
Autor: Carlos Bassas del Rey
Editorial: Toro Mítico (2012)
Páginas: 232

Título: El misterio de la gruta amarilla
Autor: Carlos Bassas del Rey
Editorial: Quaterni (2015)
Páginas: 304

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Esta entrada fue enviada el viernes, 6 d+02:00 noviembre d+02:00 2015 a las 10:35 y está archivada bajo Novela histórica. Puedes seguir las respuestas a esta entrada a través de la fuente RSS 2.0. Puedes dejar una respuesta, o trackback desde tu propia página.