VIKINGOS – James L. Nelson
Mediados del siglo IX de nuestra era. Los mares del norte de Europa son presa habitual de los barcos provenientes de Noruega y Dinamarca, desde donde los llamados vikingos asolan las costas de las islas Británicas. Hasta tal punto es su actividad en aquellas tierras, que si bien, en otros tiempos, simplemente hostigaban y robaban en las costas en los cauces de los rÃos, cada vez resulta más habitual su establecimiento en aquellos territorios a los que llegan. Es el caso de Irlanda. La novela que hoy reseño se desarrolla en aquellas tierras en las que reyezuelos de comarcas y pequeños territorios, luchan entre ellos por el poder total de la región.
Una de esas ciudades llamada Dubh-Linn, que luego tomará mucha importancia en la historia de aquel todavÃa embrionario paÃs, es el objetivo de un grupo de noruegos, comandado por Ornolf y su yerno Thorgrim. Ambos, junto a más de cincuenta guerreros, entre los que se encuentra Harald, hijo y nieto de ambos capitanes, se embarcarán en una aventura en la que entrarán en juego las luchas entre los reyezuelos que pretenden una corona que les haga dominar y reinar sobre los demás. Mientras, Dubh-Linn es dominada por los daneses, nuestros protagonistas juegan una baza que no buscaban en la guerra que impera en el territorio. Las alianzas, los pactos y las traiciones embarcan al lector en la oscura historia de Irlanda, de la mano de los protagonistas.
James L. Nelson, novelista de esta primera novela de una saga que empezó a publicar en nuestro paÃs la editorial Pámies a principios de 2017, consigue que el lector entre en el juego sangriento de las invasiones y guerras que durante el siglo IX plagaron de terror y muerte Irlanda. Mientras los pequeños señores de comarcas y regiones luchan por hacer imperar su autoridad sobre sus vecinos, la población también tiene que hacer frente a los habituales ataques de los hombres del mar, daneses o noruegos. El autor nos plantea, de manera dinámica y de la mano de sus protagonistas, los juegos de poder que imperaban en aquella época, haciendo posible alianzas imposibles. Los personajes resultan creÃbles, con cierta profundidad de carácter en sus personalidades, pero sin dejar de lado las aventuras y peripecias que deben de sufrir Ornolf, Thorgrim y Harald en su afán por no solo lograr un buen botÃn, sino también lograr salir vivos de una guerra que ni les incumbe y, sin embargo, les coloca en una situación más que difÃcil.
Vikingos es una novela muy entretenida, llena de peleas y batallas. Su autor conoce bastante bien la época, costumbres y caracterÃsticas de aquellos pueblos que chocaron en Irlanda. Enmarca con seguridad los enfrentamientos y alianzas entre ellos, mostrando al lector la debilidad extrema de estos acuerdos, con la idea de lograr expulsar a unos y dominar a otros. De alguna manera esto provocó que no solo la sangre se derramara en los campos de batalla, sino también que inevitablemente se fundiera en nuevas y futuras generaciones. Por mi parte, me ha parecido un ejercicio literario muy entretenido de leer y ya me he hecho con su segunda entrega, recién publicada por Pámies, editorial que no descansa en su afán de descubrir y redescubrir al público buenos ejemplos de novela histórica, género algo denostado y manido en nuestra actualidad lectora.
Parce una novela entretenida y disfrutable aunque yo ando un poco saturado de vikingos por culpa de la serie homónima.
PD: El formato de la reseña no es el «clásico», la letra y tal.
Entretenida es… Para pasar el rato sin levantar la ceja. Buena novela de entretenimiento y bien escrita.
Pues yo estoy como Vorimir pero sin saturación (de Vikingos no acabé ni la primera temporada) y de la única novela que tengo (en realidad un regalo de Navidad), no pasé del quinto capÃtulo por aburrimiento. Los vikingos me dan sopor, mucho sopor…el tirón que tienen ahora , es incomprensible para mÃ. Supongo que es cosa de la serie…y de los malditos hipsters. Como siempre, gracias por la reseña Iñigo.
Para pasar un rato de lectura ligera, funciona, sea de vikingos o no lo sea. Eso me es indiferente.
Muy buena reseña Iñigo. La verdad es que las novelas siempre han estado un poco de lado en mi lista de lecturas, quizá por falta de tiempo. Pero después de leerte me entran ganas de echarle el guante.
Abrazos!