NORTE CONTRA SUR. HISTORIA DE LA GUERRA DE SECESIÓN – Jesús Hernández

Norte contra Sur. Historia de la Guerra de Secesión. Jesús HernándezA lo largo de los últimos días se ha hablado bastante de este libro en Hislibris, desde que el autor en persona tuvo la amabilidad de anunciarnos su futura publicación, motivo por el que no he podido resistirme, en mi calidad de aficionado al tema y una vez leído el libro, a enviar esta humilde reseña sobre él.

De qué trata el libro.

El libro narra la historia de la Guerra de Secesión norteamericana, que tuvo lugar entre 1861 y 1865. La estructura del libro pretende seguir un hilo temporal, aunque hay grandes saltos adelante y atrás, lo cual hace perder de vista la relación que en su día tuvieron entre sí los sucesos acaecidos en diferentes lugares. No olvidemos que el teatro de la guerra fue inmenso. Además el libro contiene más narración de tipo anecdótico que análisis profundo, lo cual no quiere decir que no haya algunos análisis, pero estos me han parecido livianos, simples, más de tipo divulgativo que historiográfico, y en muchos casos sin conclusiones claras. Un ejemplo sería la esclavitud como causa de la guerra, asunto espinoso donde los haya.

Además de la narración de los hechos el autor se detiene, aquí y allá, para narrar diferentes aspectos humanos de la contienda. Son capítulos interesantes: la vida de los soldados, las esperanzas diplomáticas, la vida de los esclavos, las novedades técnico-militares que la convirtieron en la primera guerra contemporánea… Desde mi punto de vista son cuestiones de gran interés, aunque no concuerdo con algunas de las conclusiones que se sostienen en el libro. Por ejemplo, no creo que el soldado sudista fuera, intrínsecamente, mejor que el nordista.

Además, el libro se completa con una serie de apéndices sobre la presencia de españoles en la contienda, diez lugares importantes que pueden visitarse hoy, diez películas y diez obras literarias que tienen como marco esta contienda, un listado de batallas, otro de protagonistas, cronología y bibliografía. Sobre esta última decir, por cierto, que comete el error, desde mi punto de vista, de mezclar obras de historia y de ficción, sin distinguir unas de otras.

Sobre el autor.

Poco voy a decir sobre Jesús Hernández, pues su presencia aquí es sobrada presentación para los que hemos tenido la ocasión de intercambiar con él algunos puntos de vista. Decir tan sólo que sus obras anteriores se distribuyen en dos grandes grupos: anécdotas: “Las Cien Mejores Anécdotas de la Segunda Guerra Mundial”, “Hechos Insólitos de la Segunda Guerra Mundial” o “¡Es la Guerra! Las Mejores Anécdotas de la Historia Militar”, entre otros; e historias breves: “Todo lo Que Debe Saber Sobre la Primera Guerra Mundial” y “Breve Historia de la Segunda Guerra Mundial”.

Esta es pues, si no me equivoco, su primera obra extensa.

De las cosas que me han llamado la atención.

En alguno de los hilos de este blog, no recuerdo cual, pero fue en el que nos anunciaba el autor la futura publicación de su libro, el adelantaba que era un libro que no aportaría información nueva a quien ya tuviera conocimientos sobre el tema de la guerra civil americana. Se trata de un comentario totalmente cierto, el libro se define mucho mejor como divulgación que como investigación, pues no hay aportación de datos profundos, ni un enfoque novedoso, sino un resumen general de la contienda.

Por otro lado el estilo narrativo es ameno. Sin excesivos “palabros” técnicos ni frases enrevesadas. Es pues un libro entretenido, y para quien no pretenda rebuscar, claro.

Para quien no pretenda rebuscar, claro. Porque para conocedores del tema saltan a la vista párrafos que son un tanto ambiguos. Un ejemplo es cuando se narra la primera batalla del Bull Run, donde “La comparación entre el General Jackson y una sólida pared” no menciona la presencia de los cinco regimientos de su brigada en torno a él. Hay que entender que no pretende el libro narrar los acontecimientos con detalle, pero no pueden dejarse fuera, una vez metidos en harina, datos relevantes. O párrafos que simplifican en exceso: los combates de Henry Hill, por buscar otro ejemplo de la misma batalla, fueron bastante mas complejos que dos descargas de fuego y una carga a la bayoneta.

Por otro lado hay que decir que el libro no se extiende en batallas. Es más, en general, pasa por encima a vuelapluma, quedando el esfuerzo para los acontecimientos generales: movimientos de ejércitos, esperanzas de las campañas, gestiones diplomáticas, cuestiones políticas… Siempre sin profundizar, pero hay que recordar en todo momento que el libro tiene una intención principalmente divulgativa y de entretenimiento.

Queda añadir que el libro se centra en los acontecimientos que tuvieron lugar en el frente de Virginia, acontecimientos que entonces tuvieron mucha mayor repercusión ya que eran regiones más pobladas y con mayor interés mediático, acontecimientos que tuvieron y tienen mucho más “glamour”, con el General Lee al frente, pero acontecimientos que fueron, relativamente, de mucha menor importancia para el resultado final de la contienda que los que tuvieron lugar en el oeste: en Kentucky y Tennesee, y en torno a los cauces de los grandes ríos Ohio y Mississippi. O en el mar, tema muy poco tratado, a excepción del famosísimo duelo de acorazados de Hampton Roads.

Para terminar con las pegas decir que discrepo con algunos de los planteamientos del libro, no creo que la esclavitud fuera una causa tan importante en el estallido de la guerra, ni que el soldado sudista fuera mejor que el nordista, o que el motivo por el que Jackson fracasara en la campaña de los siete días fuera porque no luchaba en domingo, o al menos no son éstas las conclusiones que se extraen de otras fuentes, tal vez peores que las empleadas por el autor, o tal vez mejores, que he tenido la ocasión de consultar. Pero esto son puntos de vista, opiniones, discrepancias, mucho más interesantes para un debate que para una reseña.
Reseña que no quiero acabar sin hacer referencia a un dato positivo. Este libro, aunque tal vez no todo lo bueno que sería deseable, es al menos una primera incursión de los escritores y las editoriales de nuestro país en este conflicto tan interesante desde el punto de vista de la historia militar. Abre una puerta que estaba cerrada, y sólo por ello el proyecto es valiente, y dentro de sus limitaciones, bueno. Esperemos que tras este surjan otros, y que la calidad vaya aumentando.

Opino, por supuesto, con todo respeto, además.

NORTE CONTRA SUR. HISTORIA DE LA GUERRA DE SECESION.
Jesús Hernández.
Editorial: Inédita Ediciones.

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83 comentarios en “NORTE CONTRA SUR. HISTORIA DE LA GUERRA DE SECESIÓN – Jesús Hernández

  1. juanrio dice:

    Esperaba esta reseña con ansia y me ha pasado…lo que me temía. Compraré el libro porque seguro que encuentro puntos interesantes pero espero que Jesús u otro escritor español se anime a escribir un libro que trate en profundidad este tema. O que alguna editorial se anime a publicar algún buen libro aún no traducido ya que con mi ingles no da para tanto.

    Gracias Koenig por todo

  2. solharis dice:

    Koenig, no podías ser más oportuno porque es mi última adquisición. Sólo le eché un vistazo pero veo que mi primera impresión no estaba mal encaminada. Esperemos que alguien se anime a profundizar en este tema, tanto en lo militar como en las razones que produjeron la guerra y que van más allá de la esclavitud (estoy de acuerdo contigo en esto). No veo tan claro, en cambio, que los soldados sureños no fueran mejores… Aunque nunca sabremos qué hubiera pasado de combatir los soldados del Norte en las mismas lamentables condiciones que sus enemigos.
    Sólo me ha extrañado que no menciones la carencia de cualquier mapa, incluso para situar los estados. Pero la reseña me parece bastante útil y si el libro entretiene, pues daré por bien empleada la compra.

    Un saludo.

  3. Licurgo dice:

    Coincido con Solharis en que el soldado sureño era mejor, por lo menos de a priori. era más «rústico», es decir, vivía más apegado al campo, a la caza de modo que estaba acostumbrado a disparar, a la vida de campamento y las marchas largas. En suma, estaba mejor preparado para la guerra que el urbanita del norte.
    Si la guerra de Secesión se hubiera mantenido en un tipo de guerra convencional al estilo napoleónico bien hubiera durado mucho más o se hubiera llegado a una paz negociada. Sin embargo, la novedosa intervención de Grant (y su instrumento Sherman) a la que podríamos identificar con el inicio de la guerra del siglo XX, trasformó la faz del conflicto. «Mientras Lee ganaba batallas, Grant ganaba la guerra».
    Lee era un magnífico general napoleónico; Grant un buen general del siglo XX.
    juanrio, tendrás que buscar profundidad en otros autores.

    Me uno a vuestro deseo de que se publique más sobre la Guerra de Secesión, sobre las causas reales de la misma, sobre cómo trasformó el modo de hacer la guerra (los observadores europeos no comprendían cómo las unidades de caballería desmontaban al llegar al combate para pelear como infantes), sobre su influencia en futuros o en coetáneos conflictos, etc…
    Veremos si alguien nos escucha y deja un pequeño hueco entre tanta SGM.
    Saludos.

  4. Urogallo dice:

    Yo si opino que el soldado sudista era netamente superior, aparte de estar netamente mejor comandado y tener mucho más claros los objetivos por los que combatía.

    En cuanto a su calidad hombre-hombre, hay que tener en cuenta que en el resto de conflictos americanos no se nota ninguna diferencia entre los soldados de uno y otro lado de la línea mason-dixon, pero la calidad de un combatiente también se deriva de su moral y sus ideales.

  5. Incitatus dice:

    Yo no puedo decir nada por que realmente conozco poco sobre la Guerra de Secesión, pero me resulta interesante la reseña. Me he centrado más en el debate sobre las causas y las consecuencias que sobre el conflicto en sí. ¿el libro supongo que puede ser interesante para iniciarse, no?
    Estoy de acuerdo que la esclavitud solo era una cosa más en un conflicto latente que se forjaba desde muchos años atrás.
    Gracias Koenig

  6. Germánico dice:

    Dejando al margen la esclavitud, ¿fueron los diferentes sistemas económicos determinantes para el estallido de la guerra, o eso es un tópico? Confieso que es un conflicto del que sólo sé por el cine y las series de TV (curiosamente, ahora mismo estoy viendo la primera temporada de Norte y Sur).

  7. Incitatus dice:

    Yo he estado en el sur de Estados Unidos y todavía se nota una grandísima diferencia con el norte. Hay además un sentido casi nacional de los habitantes por el sur que lo consideran distinto al resto de EEUU. Así que problablemente entonces la división era aún mayor y el sentimiento nacional diferenciador también.

  8. Koenig dice:

    Buenas tardes.

    Con respecto a la «rusticidad» del soldado sureño respecto al del norte hay que tener en cuenta un par de cosas. No estoy tan convencido. En el ejército nordista combatieron soldados de estados rurales del medio oeste como Ohio, Kansas o Indiana, y no resultaron ser ni mas ni menos eficaces que regimientos de Nueva York o de Massachussets.

    Para muestra las que, probablemente, fueron las dos brigadas mas famosas del ejército unionista en el este.

    La «Irish Brigade», compuesta por tres regimientos de Nueva York: 69º, 63º y 88º, mas el 116º de Pennsylvania y el 28º de Massachussets, era de origen mayoritariamente urbano, y combatio, con laureles, en casi todas las batallas del escenario del este.
    La «Iron Brigade», compuesta por tres regimientos de Wisconsin: 2º, 6º y 7º, mas el 19º de Indiana y el 24º de Michigan, era de origen mayoritariamente rural y combatió, también con laureles, en todas las grandes batallas del este desde la 2ª del Bull Run hasta Gettysburg.

    Con respecto a la moral superior de los sudistas. McPherson sostiene, con razón creo, que no se debió especialmente a que consideraran que combatían por una causa justa. Al menos al principio. Los propietarios de esclavos, por ejemplo, eran una parte minoritaria de la población, y a la otra parte, mayoritaria, no les importaba demasiado el problema de la esclavitud. Las diferencias entre los gobiernos estatales y el federal (probablemente, por cierto, la causa profunda de la guerra), no eran de especial dominio público. Ahora bien, 80 años después la palabra independencia seguía siendo un poderoso movilizador en aquellos Estados Unidos. Y, a fin de cuentas, fue el ejército nordista quien llevó a cabo la invasión.

    Por otro lado el soldado confederado estuvo bastante bien comandado en el este. En el oeste, tras la muerte de Albert Sidney Johnston (no confundir con Joseph E. Jonhnston) en Shiloh, eran tan malos como los unionistas, hasta la llegada de Grant, Sherman y Thomas.

    Opino.

    Saludos.

  9. Guayo dice:

    Desde que tengo memoria no he podido leer un libro en español sobre la GCA, debe ser muy interesante leer una versión de la guerra escrita por un autor que no sea de Estados Unidos, que raro que no se incluyera un mapa, algo tan importante para los que les gustaría seguir las acciones, campañas y batallas o entender la división del norte y Sur, algo tan importante para entender los orígenes de la guerra.

    Muy buena reseña Koenig, para parece muy importante que menciones que la esclavitud no fue uno de los principales motivos de la guerra. Sobre los orígenes de la guerra solo puedo decir que siempre lo he visto como una combinación de varios aspectos económicos y sociales como la resistencia del sur a modernizarse, el no querer cambiar su economía agraria por métodos industrializados, el extremo temor del control federal sobre los estados y sus decisiones políticas, el deseo de fraccionarse e independizarse, etc…. Creo que todo esto daría solo para un buen libro, todavía causa controversia los motivos de este conflicto y hay algunas repercusiones, como ejemplo se puede ver que en algunos estados sureños hasta hace poco se ondeaba la bandera confederada (South Carolina State House) que todavía es vista como un signo de rebeldía contra el gobierno Federal.

  10. Urogallo dice:

    Aunque resulta dificil encontrar historias concretas de la guerra por la independencia de la confederación, si es relativamente fácil encontrar historias generales sobre los EEUU que tratan con bastante profundidad el periodo fundamental entre 1815 y 1860 que determinó fundamentalmente el estallido de la guerra civil.

    Aunque el esclavismo le importaba más bien poco o nada a muchos sureños que no poseían esclavo alguno, las cuestiones relacionadas con el predominio del gobierno federal encrespaban los ánimos tanto entonces como ahora.

    Para los sureños, la guerra era un conflicto claro entre la soberanía de los estados y la del gobierno federal, de un gobierno que dictaba leyes y regulaba impuestos desde la lejanía de Washington sin tener en cuenta a las asambleas estatales.

    Puede parecer algo relativamente endeble para motivar una guerra y sostenerla, pero como se decía en la declaración de independencia del estado de Virginia: «Los justos derechos que motivaron la independencia de los 13 estados respecto a Inglaterra, no pueden justificar ahora su esclavitud a manos del gobierno federal» ( más o menos, creo que hacia referencia a la población antes que a los estados).

  11. Licurgo dice:

    Guayo, no creo que este libro leas una versión no americana de la Guerra de Secesión.
    Es terrible que sólo se pueda citar un libro divulgativo sobre este conflicto (por lo cual creo que es excesivamente caro desde mi punto de vista); de aquí ya saltaríamos a los Osprey editados por Del Prado (Antietam, Chikamauga, 1ª de Bull Run y Viksburg) o la libro sobre Antietam editado por Ariel.
    Por no hablar de las carencias de otras guerras que han marcado la Historia de la Humanidad o el modo de hacer la guerra sencillamente: carencias como la guerra franco-prusiana, guerra ruso-japonesa, guerra de Crimea, o guerra de los Boers… son carencias imperdonables en nuestra historiografía.
    Este libro constituye un tímido acercamiento al tema de la guerra de Secesión (Koenig me corregirá si me equivoco) carente de análisis profundos o interpretaciones históricas. Es decir, un libro sin pretensiones cuyo valor radica en si es capaz de incentivar en el lector un ansia por saber más sobre la Guerra de Secesión saltando a otras obras más ortodoxas/académicas. Ahí es donde se puede conocer su valor real. Amenidad y rigor, nada más.

    Volviendo al tema del soldado del sur, sigo pensando que cualitativamente era mejor, en líneas generales. Las unidades que citas, Koenig, son un «accidente» dentro del macro-ejército de la Unión. Tienes razón en que en las mismas circunstancias que el soldado sureño, no dieron el mismo resultado. Debemos sumar a esto la calidad del mando, la moral y la motivación.
    También habría que analizar el sistema de conscripción de los ejércitos y el tiempo de servicio en cada uno.

    Respecto a las causas de la guerra, hablar de esclavitud es reduccionista, evidentemente; en el norte había estados esclavistas y en el sur la gran masa de combatientes no tenía esclavos. Se deben contemplar causas políticas (reseñadas en posts precedentes), sociales (pergeñadas igualmente en foristas anteriores) y económicas (necesidad de materias primas baratas por parte del Norte, comercio con Europa por parte del Sur, necesidad de mano de obra barata en la industria, etc…).

    Por otro lado (y no el último), la guerra de Secesión es sumamente interesante por el uso de los medios de transporte tanto en su logística como en el desplazamiento de tropas (principalmente el tren), su influencia llevará, por ejemplo, a Prusia a realizar un control férreo de su red de ferrocarril; creando una unidad específica dentro del Estado Mayor para ello y que dará lugar a una movilización mucho más rápida (tanto en la guerra franco-prusiana de 1870 como en la PGM). También es atractiva por el aspecto económico de los escenarios de combate; la campaña del Mississipi y el raid de Sherman buscan estrangular económicamente al Sur (antes se había llevado a cabo el sistema continental en las guerras napoleónicas o el bloqueo de la flota por parte británica; pero ahora se convierte en algo activo, algo que mueve ejércitos).
    En definitiva, y tras dejar muchísimos aspectos de esta guerra en el tintero, creo que la Guerra de Secesión es muy atractiva y necesita, OBLIGA a que los editores españoles publiquen más bibliografía, y más bibliografía seria sobre el tema.
    Saludos.

  12. David L dice:

    Lo poco que conozco de la Guerra de Sucesión lo sé por las pelis que he visto por la TV, así que poca cosa….

    Mis felicitaciones a Jesús Hernández. Siempre hay un primer libro con el que uno se adentra en un determinado tema.. tal vez éste de Jesús sea un buen comienzo para empezar a conocer algo más de esa tan desconocida guerra para mí.

    Un saludo.

    PD1: Una pregunta para Jesús:¿ presentarás tu libro en el Día de San Jordi?

  13. Hola, Koenig! Pues felicidades por la reseña, me ha gustado mucho, ya que todas las críticas están muy bien argumentadas.

    Pues sí, amigos, espero que este libro motive a algún historiador español a acometer la tarea de escribir un libro ortodoxo-académico sobre la Guerra de Secesión; aunque si quiere tratarla en profundidad habrá de tener presente que mi libro «ligero» ha requerido 436 páginas…

    David L, pues no no sé si me llamarán para firmar en Sant Jordi; el año pasado firmé en el Vip´s pero he visto que lo han cerrado, así que no tengo ni idea. Lo que me haría también ilusión sería ir a firmar a la Feria del Libro en Madrid; cada año dicen que me van a invitar y luego… a ver si este año sí que sí.

    ¡Saludos!

  14. juanrio dice:

    Jesús, espero que te inviten a firmar en la Feria del Libro de Madrid ya que así tendriamos ocasión de conocerte en persona la banda de madrileños que poblamos este foro. Yo tengo un amigo que tiene mando en plaza en la feria así que hablaré con él.

  15. Ascanio dice:

    Vaya, Koenig, me has pisado la reseña (lo siento, Jesús, no sabía nada…).
    No he terminado de leer el libro (de hecho creo que voy por la página 100 aproximadamente).
    Koenig, por lo que he leído hasta ahora, coincido contigo en que es un libro que profundiza poco, pero como insinúa Jesús, hay que tener en cuenta que son más de 400 páginas. Supongo que si intentásemos sintetizar en un solo volumen todo el conocimiento de la Guerra de Secesión estáriamos delante de varios miles de páginas. Creo que lo que ha pretendido el autor es llenar el hueco que existe sobre esta contienda en español.

    Desgraciadamente parece que sobre la Guerra Civil y la IIGM debemos tragarnos doscientos libros cada año, y hay otros pasajes de la Historia como éste, o como el de la Revolución americana que prácticamente son inexistentes en nuestras librerías. Y lo digo además desde un punto de vista totalmente egoísta e interesado, porque jamás me compraría un libro sobre la Guerra Civil ni sobre la IIGM. Lo siento, hay otros acontecimientos históricos que me llaman más la atención. Y como hislibreña asidua, también diré que las pocas ganas que tenía de leer sobre estos sucesos me las quitan el continuo empacho de reseñas de libros acerca de ellos que aparecen aquí. Y con esto no quiero ofender a nadie, ojo, sólo quiero destacar que cuando aparecen reseñas como esta de Koenig, que me parece estupenda (y muy parecida a la que yo habría hecho) las leo como agua de mayo.

    Algo que quería comentar al hilo de lo que dice nuestro amigo Koenig, es el aspecto humano del libro. Está plagadito de comentarios personales y documentos de la época, algunos francamente curiosos, como la descripción de Lincoln que hace Nathaniel Hawthorne. Esta manera de adornar los libros es algo que me ha gustado siempre, porque quita el punto de vista «aséptico» y le añade una dimensión humana. Me recuerda mucho al libro 1776, sobre la Revolución americana.
    Y al igual que éste, adolece de un defecto (sí, Jesús, ya sé que lo sabes, pero hay que decirlo): la falta de mapas. Sólo hay uno. Ay…¿tanto hubiera costado?

    Desde el punto de vista del estilo, hay que comentar que es amenísimo. De hecho, más de una vez le comentaba a Arauxo mientras lo leía, que «me lo estaba pasando pipa». Palabras textuales, y si no, que venga Arauxo y lo desmienta.

    En resumen (no puedo pararme más, me tengo que ir), hasta ahora, considero que Norte contra Sur cumple lo que promete. Abrir camino.

    Saludetes.
    («Volveré», como diría Terminator).

  16. Urogallo dice:

    Hombre, el mercado nos ofrece lo que los consumidores demandamos, nos guste o no.

    Un ejemplo es la obra de Connolly en Anaya. Hoy hablamos de él con un respeto semi-mitológico, pero en su día no fue ningún éxito editorial precisamente.

    De hecho, el libro pudo editarse gracias a que Anaya pudo destinarlo a las bibliotecas de colegios e institutos, igual que otros muchos, y todavía se podía encontrar en librerías a mediados de los 90, a pesar de que llevaban más de 10 años publicados.

    El mercado solo entiende de ventas.

  17. Ascanio dice:

    Ya. Pues debe ser que yo estoy dentro de una minoría que ni manda ni demanda.
    Eso parecido pasa como con la tele-porquería. Se dice que la telebasura es lo que demanda el público (ojo, que no estoy comparando el interés por la IIGM con la telebasura, no me entendáis mal, por favor). Pues que queréis que os diga, a mí me importa un comino. Yo demando televisión de calidad. Pero debe ser que somos una minoría.

  18. Incitatus dice:

    Ascanio tengo la teoría de que los medidores de audiencia los han puesto en casas de aquellos que ven telebasura… NO conozco a nadie que lo tenga y todos mis amigos y familiares la demandan… Seguro que al final la tele que más se ve es La 2 ;-)

  19. Urogallo dice:

    Los medidores de audiencias ya no se usan desde la época de ALF :D.

    Ahora lo que se utiliza son encuestas diarias a grupos de población seleccionados…como para todo.

    Lo sé, nadie conoce a uno de esos creadores de opinión.

    Pero es lo que hay.

    En el caso de los libros es mucho más sencillo. Si un tema vende, vemos un aluvión de libros de la misma temática ( Codigo Da Vinci).

  20. Ascanio dice:

    ¿Código da Vinci? Uy, mira, ahí que podíamos hacer un símil con la tele-basura…(sin ofender a los que le gusta este libro, que conste).

  21. Curistoria dice:

    Buena reseña amigo :)

    Jesús, yo también espero que vengas por Madrid para ver si coincidimos. Por otra parte, te honra encajar tan bien todos los «palitos» de la reseña.

    Saludos.

  22. Licurgo dice:

    Urogallo, siento corregirte, pero Conolly lo editó Espasa-Calpe y uno de los problemas es que la edición parece juvenil cuando en Gran Bretaña salieron los tres libros en un sólo volumen con formato «adulto».
    Saludos.

  23. Urogallo dice:

    No todos, no todos, POMPEYA, y LA VIDA EN TIEMPOS DE JESUS DE NAZARETH,los editó ANAYA.

    De todas formas, es que el libro es «juvenil», muchas ilustraciones y muy poco texto, y este muy simple, apenas para poner a las imagenes en su contexto histórico.

    Eso sí. ¡Que ilustraciones!.

  24. Licurgo dice:

    Hum, desconocía esos libros.
    Sé que en inglés ha editado algunos más bastante interesantes y similares a los ejércitos romano y griego.
    ¿Merece la pena el de Pompeya?.
    Saludos.

  25. Urogallo dice:

    Hombre, es curioso encontrarse a Connolly tratando la perspectiva civil de la antiguedad.

    Si no te molesta la ausencia total de cuestiones militares, es una maravilla a la hora de conocer la vida diaria de los romanos en aquella época. Sobre todo su obsesión por comer y beber cosas calientes y cocidas.

  26. Licurgo dice:

    Connolly sacó un libro sobre la vida contidiana en Roma y Atenas que es una maravilla para la vista y una sangría para el bolsillo («La Ciudad Antigua. La vida en Atenas y Roma clásicas», Acento editorial, Madrid 1998). Lo escribe en colaboración con Hazel Dodge.
    Bueno, será un sacrificio el no ver espadas… pero haremos un esfuerzo.
    ja ja ja
    Saludos.

  27. Urogallo dice:

    Ese lo conocía, es de mediados de los 90, pero piensa que estos son ( o al menos su publicación en España) de mediados de los 80.

    Yo lo vi en su día ( el de Atenas y Roma) y no me pareció nada del otro mundo. Personalmente, no estaba a la altura de Connolly.

  28. cavilius dice:

    Pues yo lo busco con ansia, Uro. Si a alguien le sobra el tuyo, yo se lo reciclo.

  29. Koenig dice:

    Buenas tardes.

    Quiero empezar esta intervención agradeciendo a Jesús Hernández la deportividad con la que se ha tomado la reseña. Reconozco que no es excesivamente halagüeña. Pero también puedo decir que es sincera, y que no es fácil hacer una reseña con críticas. Me hubiera encantado poder poner el libro por las nubes. Creedme. En todo caso quedo, humildemente, a disposición del autor para cualquier duda o comentario que se le ocurra. Y de los demás «contertulios», por supuesto.

    Por otro lado disculparme, Ascanio, por haberte pisado la reseña. Si lo llego a saber te hubiera cedido el turno sin problemas.

    Añadir que tanto como deber tragarnos doscientos libros al año sobre la Guerra Civil o la 2ª Guerra Muncial no debemos. Ascanio, anda que no hay mercado editorial como para elegir. Aunque por otro lado puedo entender perfectamente que haya quien pueda sentirse saturado por la reseñas de estos temas, o de toda la historia militar, y el número de comentarios que mueven. Como ya comenté, me comprometo a que mis próximas cinco reseñas no van a tener que ver con historia militar. Tal vez a costa de vengarme con las quince siguientes :-) hummm.

    Saludos.

  30. Je, je, la crítica que sí me hubiera preocupado es que se dijera que el libro es aburrido. Para unos podrá ser más o menos profundo, pero hasta ahora todos los que lo han leído me han dicho que lo han hecho de un tirón…

    Por cierto, permitidme un poco de autobombo; mi editor me dijo la semana pasada que se ve que el libro se está vendiendo muy bien, de momento sigue las mismas cifras de ventas que mi mayor éxito, el 100 mejores anécdotas de la SGM (del que por cierto, acaba de salir la 5ª edición en tapa dura). Es de suponer que éste de la Guerra de Secesión no tendrá tanto recorrido, como es lógico al ser un tema «minoritario», pero es un dato que demuestra que había un público deseoso de hacerse con un libro de la Guerra Civil americana. Y lo dicho, a ver si se animan otros autores y otras editoriales; el camino ya está abierto.

    ¡Saludos!

  31. Koenig dice:

    Felicidades entonces.

    Saludos

  32. solharis dice:

    Jesús, es muy amable que te pases por aquí. Somos algo duros pero críticas más sinceras no las vas a encontrar… Yo he empezado a leerlo y sí es muy entretenido y divulgativo. La recomendación que sí te haría es incluir mapas o planos en tu próximo libro: te aseguro que eso nos gusta mucho a los lectores. Encantado si te pasas por la Feria del Libro.

  33. Blom dice:

    Pues la reseña me viene genial, ayer mismo compre el libro.. y aunque despues de haber leido todos los libros de Jesus, ya se de forma aproximada que tipo de libro es, no esta de mas leer una reseña.. y mas aun teniendo en cuenta que creo que es una buena reseña.

    El miedo que tengo esque me ocurra como con su otro libro de la PGM, que desperto por completo mi interes por otro conflicto y venga a comprar y leer mas lbros!

    Por cierto Jesus, aprovecho para felicitarte por los buenos indices de ventas de tus libros, y tambien avisarte de que en unos dias recibiras un mensaje mio, jeje.

    Un saludo a todos.

  34. Tico dice:

    Jesus, como siempre mas que un caballero de esos grandes,un amigo de esos con los que puedes charlar de todo.Yo tuve que mover cielo y tierra para conseguirme tus libros, y auqnue como Koenig, me gusta profundizar mucho mas en el tema, a mi , MUY PARTICULARMENTE, me parecen buenisimo todo lo que publicas. Te felicito,y si, la recompensa de todo el trabajo y gasto de conseguirme el el 100 mejores anécdotas de la SGM, valio totalmente , y mucho mas de lejos, la pena.Ya me consegui este, con la anticipacion debida, y aunque no me he metido de lleno, se ve q va a ser otro exitazo.Lo mejor es q es tan ameno como para el que recien comienza, como para e que ya tiene conocimientos profundos.Mi fuerte no ha sido la Guerra civil americana, pero ya lo «ojie» y esta interesantisimo.
    Un abrazo y saludos

  35. Simplemente, muchas gracias.

  36. Hola. Soy de South Carolina pero me encuentro en España, donde he comprado este libro de jesus Hernandez. Sere sincero, soy miembro activo de los Sons of Confederate Veterans y por tanto tengo simpatias por un bando – a la vez que todo amor y respeto por mi patria, los USA.
    Clarado esto, permitanme decir que el libro me ha causado una decepcion muy grande. La primera obra no traducida sobre la gran guerra americana y resulta ser un compendio divulgativo, plagado de pequeños y grandes errores, hasta en nombres y fechas, con nula investigacion del autor (hasta las notas a pie de pagina con cita de libros no llevan el numero de la pagina de la que supuestamente se cita..), un mapa que excluye por completo el frente del oeste (las operaciones en Nuevo Mexico, Texas, el territorio de Oklahoma, partes de Arkansas y Missouri). Ello es como un mapa que deja fuera la bolsa de Merida y el cinturon de hierro de Bilbao en su guerra civil.
    Lo más lamentable, no obstante, es el enfoque del autor, totalmente sectario y unilateral, el lexico usado «soldados rebeldes», «estados rebeldes», «hermanos descarriados», etc. El autor muestra a lo largo de la obra entera una terminología abiertamente nordista y yanqui. Es como hablar todo el rato de «rojos» o de «fascistas» en un libro sobre la guerra de ustedes, hablar de «heroes de la libertad» en lugar de brigadistas internacionales o de «hordas marxistas» en lugar de milicianos del PCE, por ejemplo. No voy a extenderme, pues la lista de gazapos es tan larga, aparte de los enfoques ambiguos, que llenaría unos 15 folios… Si deseo protestar (eso, es correcto) por esta cita del autor acerca de los fallos en la Reconstruction:

    «… la responsabilidad no sería tanto de los que habían defendido la causa confederada y queían seguir menteniendo sus privilegios, sino de las fuerzas politicas del Norte que no supieron trasladar al Sur los principios democráticos.» (p. 349)

    Nada más y nada menos! Privilegios? El 97% de los soldados del Sur eran de clase trabajadora o granjeros, el 95% no poseia esclavo alguno (que costaba casi tanto como hoy un coche de gama media, por cierto). hasta Karl Marx dijo que la guerra no era para mantener privilegios de unos aristocratas o liberar esclavos sino para ejercer control capitalista industrial en un estado federal mas centralizado.
    Trasladar principios democraticos al Sur? Este autor tiene idea de lo que dice? Ha leido la Constitucion de los Estados Confederados de America? Precisamente el Sur confederado lucho por defender el principio de subsidiariedad y las libertades democráticas de la Union Americana original. Pero claro, explicar esto llevaría horas… Qué pena, señores, que penita, como dicen los mexicanos. Sobre todo porque de momento este libro es lo unico que los espanoles tienen a mano en su idioma.

    A propósito, este historiador, Jesus Hernandez, dice en relacion a la participacion espanola (la mayoria eran ciudadanos de Louisiana, Florida, etc. de origen español, que no es lo mismo) que «queda pendiente a la espera de que el trabajo futuro de los investigadores pueda despejar las innumerables incognitas que encierra la presencia espanola en la Guerra Civil americana». (p. 363) Pues bien, hace un par de anos un investigador llamado John O´Donnell Rosales publico un magnifico libro sobre el tema, «Hispanic Confederates», facil de localizar si se teclea Google en internet alguna vez… Aqui su pagina web, para los espanoles interesados en estas «inumerables incognitas» que deja el trabajo del sr. Hernandez:
    http://www.hispanicconfederates.com/
    Incluye también espanoles llegados de Cuba, judios sefarditas, etc.

    Muchas gracias por su tiempo.
    Ralph

  37. Hola, Ralph;

    He leido con mucha atención tu critica, que me resulta muy valiosa al proceder de alguien que ha «mamado» (si me permites la expresión) la Guerra Civil desde pequeño, no como aquí, que tenemos un conocimiento forzosamente fragmentario y mediatizado por los que la ganaron.

    Admito los errores que puedan haber en el libro, pues no soy especialista en el tema, sólo un divulgador que intenta atraer la atención de los españoles sobre este conflicto.

    Te aseguro que la utilización del término «rebelde» no pretende ser despectiva, sino que es la que se ha venido utilizando aquí desde siempre.

    Y sobre mis simpatías, pues te parecerá sorprendente, pero son por los sudistas, por numerosas razones. Lo que pasa es que si hay que elegir entre un modelo de sociedad y otro prefiero el defendido por el Norte, pero es mi opinión, claro.

    Pues te agradezo tu contribución y espero que un historiador que ejerza como tal me tome el relevo y brinde a los lectores españoles un libro más completo sobre la guerra. Yo llego hasta aquí.

    Un saludo, Ralph!

  38. David L dice:

    «Sere sincero, soy miembro activo de los Sons of Confederate Veterans y por tanto tengo simpatias por un bando – a la vez que todo amor y respeto por mi patria, los USA».

    Desde luego su opinión me parece muy respetable, pero perdone que muestre mi escepticismo por alguien que, como es su caso, muestra claramente su simpatía por un bando, como queda claro tras su primera intervención. Su supuesta visión objetiva sobre el libro de Jesús Hernández no me sirve.

    Un saludo.

  39. Licurgo dice:

    Dejando al margen el posicionamiento que cita, y si lo elimáramos, creo que la crítica es correcta y respetuosa. Es decir, borremos que pertenezca a los sons of Confederate Veterans y la reseña no desmerece, creo, la de cualquier otro que no se posicione.
    Es mi opinión, claro.
    Saludos.

  40. Licurgo dice:

    Ahora bien, y perdón por extenderme, agradecería que fuera más concreto con los «gazapos» a lo que se refiere.
    Saludos de nuevo.

  41. Verdoy dice:

    Yo creo que el hecho de que Ralph haya advertido su posicionamiento es un plus de buena fe respecto del resto de su intervención. Y en nada afecta respecto a los conocimientos que pueda tener del tema. Todos hemos vivido la experiencia de leer textos de autores extranjeros sobre episodios de nuestra Historia, y es verdad que unos salen mejor parados que otros.

    En cuanto al libro en cuestión, no me voy a pronunciar porque no lo he leido y porque mis conocimientos sobre ese conflicto son muy superficiales.

    saludos

  42. elchavo dice:

    Mr Ralph Anderson

    gracias por traer luz a un tema poco conocido

  43. Koenig dice:

    Buenos días.

    Debo mostrar mi acuerdo con lo dicho por Licurgo y Verdoy. Creo que el Sr. Ralph Anderson ha actuado con total honradez a la hora de indicar cual es su posicionamiento antes de dar su opinión.
    Por otro lado algunos de los argumentos que plantea parecen perfectamente coherentes, y en parte coinciden con los que he tenido tenido ocasión de leer en otros autores. Yo mismo decía mas arriba que el porcentaje de propietarios de esclavos en el sur era minoritario, por ejemplo.

    Por otro lado, estimado Jesús Hernandez, debo decir que después de haber comprado y leido el libro como «Historia de la Guerra de Secesión», me amostaza un tanto que digas «no soy especialista en el tema, solo un divulgador que intenta atraer la atención de los españoles sobre este conflicto».

    Saludos.

  44. Hola, bueno, el tono de la crítica es correcto y por tanto la considero constructiva, pero una vez leída con más detenimiento veo que hay una apelación directa a mí, como autor, que no me gustaría que quedase sin respuesta:

    «Trasladar principios democráticos al Sur? Este autor tiene idea de lo que dice? »

    Pues en mi modesta opinión el principio democrático fundamental es que a nadie se le prive del derecho a voto -y ya no digamos del derecho a la libertad- por el color de su piel. Si discutimos esto, entonces creo que detrás de esa asociación de Sons of Confederate Veterans hay otras cosas.

    Saludos!

  45. Koenig dice:

    Buenos días.

    Sospecho que deberíamos estar hablando de los principios democráticos de 1860, no de los de hoy. Por suerte y por justicia, mucho mas avanzados.

    No debemos olvidar que algunos firmantes de la constitución de los Estados Unidos poseían esclavos. En las deliberaciones, de hecho, se elaboró la regla de los 3/5. Totalmente racista y condenable hoy, pero que entonces resultaba razonable, incluso generosa.

    También hay que explicar lo que el Sr. Ralph Anderson dice cuando habla de que el sur defendía el principio de subsidiariedad. Por aclararlo, y si no me equivoco, se refiere al hecho de que el sistema político de los estados sureños quería primar el gobierno estatal sobre el federal. Mientras que los estados del norte pretendían una preponderancia del gobierno federal sobre los gobiernos estatales. Hablamos de una época en que, si no recuerdo mal a McPherson, los Estados Unidos de América ni tan siquiera ténían un banco central. Por supuesto el primer sistema (estatal), mas antiguo, favorecía al sur. El segundo sistema (federal), que estaba siendo impuesto poco a poco por el norte gracias a su mayor población, favorecía al norte.

    Con respecto a la esclavitud, tan denostada por los estados norteños. Decía Alexis de Tocqueville que a pesar de ella, los negros eran, en general, mucho mejor tratados en el sur que en el norte. En el sur (es el ejemplo que Tocqueville utiliza) podías sentar a un esclavo en tu mesa, educarlo, vestirlo, sin ningún riesgo para tu preeminencia social y económica. Es mas (y desgraciadamente) eran un bien valioso. En el norte en aquella época, semejante cosa era impensable pues ese negro educado podía hacerte la competencia social y comercial. Uno de los eslóganes empleados por los adversarios de Lincoln en el norte era «¿Queréis que un negro se case con vuestra hija?». Lo cual nos indica que este asunto preocupaba a una parte importante de la población norteña. En resumen. A la sociedad del norte (en general) le importaba escasamente el maltrato a los negros, y la abolición de la esclavitud era, sobre todo, una causa moral, no real. Muy pocos abolicionistas estaban dispuestos a tratar a un negro como a un igual.

    Concluyo. Considerando, desde el punto de vista actual, y que me parece totalmente acertado, que a nadie se le debe privar del derecho al voto. El norte era tan antidemocrático como el sur en 1860. Considerandolo desde el punto de vista de 1860. Tan democráticos eran los unos como los otros (y por desgracia ninguno lo era).

    Opino.

    Acabar añadiendo, por experiencia en estas lides, que no quiero que nadie entienda este comentario como un apoyo a la esclavitud o un argumento pro-racista. Me posiciono radicalmente en contra de cualquier tipo de esclavitud y en contra de cualquier tipo de discriminación, entre ellas la discriminación por motivos raciales.

    Saludos.

  46. Javichu dice:

    Muy acertada la anotación de Jesús Hernandez

  47. Ascanio dice:

    Koenig, a mí también me ha «chafado» un poco la afirmación de que “no soy especialista en el tema, solo un divulgador que intenta atraer la atención de los españoles sobre este conflicto”…

  48. Hombre, pues no entiendo el que sorprenda que no me arrogue el calificativo de «especialista».

    Para mí, un especialista es alguien que ha estudiado un tema concreto durante muchos años, incluso media vida, que ha estado inmerso en decenas de archivos y que su objeto de estudio es ése y ninguno más.

    Ahora bien, si comenzamos a rebajar la calidad de «especialista» pues por mí no hay problema; ahora mismo me declaro especialista en Guerra de Secesión, Primera Guerra Mundial y Segunda Guerra Mundial, que son los conflictos sobre los que hasta ahora he escrito…

  49. pepe dice:

    La tarea de divulgación -esto es, la de poner algo al alcance de la ciudadanía (antes llamada vulgo)- es esencial en cualquier campo de la cultura. Quizá su aspecto más destacado sea en el ámbito científico, pero a mi juicio es necesaria en cualquier disciplina. Para ser un buen divulgador, además, no hace falta ser especialista en aquello que se divulga.

  50. Koenig dice:

    Buenas tardes.

    Aclaro. No ha sido mi intención emitir ningún juicio de desvalor contra los divulgadores. Me parece muy respetable la función de divulgación. Es mas, me amostaza que alguien sea «solo» un divulgador que «intenta atraer», porque pienso que un buen divulgador debe ser especialista en el tema. A mi no se me ocurre escribir un manual de divulgación de física cuántica.

    Por otor lado: Especialista, es aquel: «Que cultiva o practica una rama determinada de un arte o una ciencia». (Diccionario RAE 23ª Edición). La definición no establece a partir de qué nivel de conocimientos es uno un especialista.

    Opino.

    Saludos.

  51. pepe dice:

    De acuerdo con la definición del RAE, tan especialista en historia eres tú como el autor del libro. Cultivar una disciplina no significa, necesariamente, dedicarse a la investigación. Un profesor de física del colegio de mi hijo, por ejemplo, que no tenga relación alguna con el mundo de la investigación, puede escribir un buen libro cuyo objetivo sea popularizar la física cuántica. Para ello necesitará, además de tiempo y esfuerzo, un talento especial para explicar de forma amena un tema tan árido. Muchos investigadores carecen, a menudo, de dicho talento, y suele llamar la atención que un gran investigador sea, al mismo tiempo, un excelente divulgador. Hay también buenos libros de divulgación científica escritos por periodistas.

    Suele ser fácil distinguir cuándo un autor escribe depués de años de bucear en archivos y de consultar documentos originales y cuándo lo hace con la simple intención de acercar un tema al lector. Entre otras cosas, porque suelen decirlo bien clarito en la introducción o en la sinopsis. Si Jesús Hernández ha conseguido escribir un libro ameno y bien documentado sobre la guerra civil americana, entonces habrá cumplido honradamente su propósito.
    Y si ha cometido errores de bulto, o ha presentado una visión parcial, entonces no lo habrá cumplido. Y que mis amigos Koenig y Ascanio se sorprendan porque el autor declare ser tan sólo un divulgador me resulta tan raro como si se sorprendieran de que los Reyes Magos son los padres.

    Un último ejemplo y termino en cinco líneas. Juan Eslava Galán, que pasa por ser un medievalista, escribe sobre guerras civiles y sobre lo que le echen. Según el Friki-Test, tarda poco más de un año en escribir un ensayo que, en algún caso no pasa de ser un anecdotario. No me quedan más líneas para sacar conclusiones.

  52. Ascanio dice:

    Pepe, con lo de que me ha «chafado» me refería a que, a pesar de que el libro de Jesús es ameno y muy entretenido (no tengo conocimientos mayores para desenmascarar si hay o no errores de bulto), pensaba que también era especialista en el tema. A eso me refería. No he cambiado mi opinión sobre el libro. Se puede escribir un libro de divulgación siendo un especialista, y sin serlo también. Pero es que yo pensaba que lo era. Eso es todo. Además creo recordar (aunque mi memoria es peor que la de una garrapata búlgara) que en la sobrecubierta ponía que era especialista en Historia militar, o algo así (Jesús, corrígeme si me equivoco, es que no tengo ahora el libro a mano).
    Pero no sé si considerarte mi amigo después de lo que has dicho de los Reyes Magos. ¿Son los padres? ¿Los padres de quién?

  53. Ascanio dice:

    Uy, me han moderado. Tarde o temprano tenía que llegar…

  54. Hola, me empieza a parecer una discusión un tanto bizantina, pero como es un foro de historia tampoco está mal traido…
    A ver, Ascanio, especialista en Historia Militar podemos decir que sí, pues todos mis libros tratan de ese campo (aunque admito que existiría una contradicción en el término, un oxímoron, pues no creo que uno pueda ser especialista en un campo tan amplio), pero especialista en la Guerra de Secesión seguro que no lo soy. De hecho, no me consta que en España haya un auténtico especialista en la Guerra de Secesión, pero igual lo tengo mal averiguado.
    Y yo mataría aquí el tema del «especialista», porque no creo que nos lleve a ningún lado…
    Saludos!

  55. Daniel dice:

    De acuerdo con que es la primera obra no traducida, pero sí se pueden encontrar algunas traducciones que no son malas, como las siguientes (que tienen ya 4 décadas, pero siguen siendo válidas):
    V. AUSTIN, La guerra de Secesión, 1861-65, Buenos Aires 1964; I. MERÉ, La guerra de Secesión, Buenos Aires 1965. Ignoro si tienen edición española, pero el mundo editorial argentino siempre han tenido muy buen nivel.
    Sobre la cuestión del origen de la guerra, está totalmente aceptado que el tema del abolicionismo era una escusa, sin negar su importancia moral, pero las verdaderas causas fueron otras: El norte tenía políticas proteccionistas sobre sus productos, con fuertes aranceles sobre los productos exteriores, dado que no le interesaba competir con la potente industria europea, con respecto a la que se encontraba en clara desventaja; el sur defendía la libre competencia, dado que la exportación de algodón a Europa le daba grandes ingresos. El equilibrio pactado entre los estados del norte y del sur se rompió con la apertura de los nuevos territorios hacia el oeste, con la libertad de elección por los nuevos estados de sumarse a los estados esclavistas o a los abolicionistas. Los estados del sur necesitaban estas tierras para aumentar el cultivo del algodon, pues sus suelos estaban desgastados, y para ello necesitaban que los nuevos estados fueran esclavistas dado que para cultivar esas tieras necesitaráin más esclavos. Para los del norte esto suponía una restricción para que sus granjeros libres pudiesen instalarse allí, y, por tanto, un daño para sus intereses.
    El tema es mucho más amplio y da para mucho.
    He leído recientemente un artículo que resume bastante bien todo este asunto. Lo podéis encontrar en http://www.canalsocial.net/GER/ficha_GER.asp?id=8631&cat=historia
    Un saludo a todos los amantes de la historia y al autor del libro, pues, pese a algunos errores y a que no profundice mucho en el tema (si profundizara mucho nos quejaríamos de que el libro es un tostón por lo excesivo de su erudicción), al menos ha intentado hacer algo divulgativo para los muchos a los que nos apasiona la historia y que puede servir de una primera aproximación para que, el que quiera, pueda después profundiar más.

  56. Urogallo dice:

    Hombre, otra cuestión fundamental para la secesión fue que la ventaja demográfica cada vez favorecía más al norte.

    Desde la independencia, la política noteamericana había estado en gran medida dominada por los representantes del Sur, pero la balanza demográfica había roto ese dominio hacia años, y con el tiempo, solo podría volverse aplastante contra el Sur, lo que le impediría defender sus intereses con fuerza frente a los del Norte.

    Muchos en el Sur apostaron por la Secesión, antes de que el peso demográfico del Norte les aplastase en el congreso.

  57. juanrio dice:

    Jesús, que haces que no estás firmando libros…

  58. Pues este año no me han llamado. El año pasado firmé en Vip´s y a los pocos meses cerraron, así que igual es que creen que soy gafe…
    Pero a ver si me paso por Madrid.

  59. Koenig dice:

    Buenas tardes.

    Acabo de leer la reseña y, personalmente, me parece extraordinariamente condescendiente. Pero en fin, cada cual tiene derecho a opinar lo que quiera.

    Saludos.

  60. GALGO64 dice:

    En referencia a la presencia de españoles en la Guerra de Secesión y curioseando un poco para aquéllos interesados he encontrado una relación de soldados, suboficiales y oficiales españoles nacidos en territorio americano y peninsular que sirvieron en distintas unidades y regimientos del ejército confederado con expresión de rango, compañía y unidad, adjunto el enlace http://www.missouridivision-scv.org/hispanic.htm
    Para más información adicional se puede contactar con un miembro de la Organización llamada Hijos de Veteranos de la Confederación que amablemente contesta y resuelve cualquier cuestión relacionada con este tema tan insospechado y tan desconocido para nosotros, se llama Gale Red y es el encargado de la parte genealógica este es su correo: galered@yahoo.com , Se trata de un antiguo soldado americano que estuvo destinado en la Base de Torrejón, Un saludo.

  61. unoqueleedemasiado dice:

    bastante bueno el libro, me gustó sobre todo la introducción al tema con los antecedentes políticos y sociales que originaron esta contienda, eché de menos una narración más interesante en las grandes batallas (al estilo de los libros de Salvat tipo «contra todo pronóstico» o «los zorros de la guerra». Para otras ediciones no estaría mal quitar la reseña del rifle «Winchester» como una invención más de la guerra si fue posterior a la misma, incluir algo sobre francotiradores que fueron bien usados en el conflicto fraticida (dejo una muestra)

    «# Colonel Hiram Berdan (American Civil War) – commanded 1st and 2nd US Sharpshooters, who were trained and equipped Union marksmen with the .52 caliber Sharps Rifle. It has been claimed that Berdan’s units killed more enemies than any other in the Union Army.

    # Sgt. Grace (American Civil War) – sniped Major General John Sedgwick at the then incredible distance of 730 m (800 yd) during the Battle of Spotsylvania Court House, with a British Whitworth target rifle causing administrative delays in the Union’s attack, leading to Confederate victory. Sedgwick ignored advice to take cover, his last words according to urban legend being, «They couldn’t hit an elephant at this dist-» upon which he was shot. In reality, he was shot a few minutes later»

    y compensar una imperdonable omisión en las últimas páginas dedicadas a peliculas y libros recomendados: la serie «NORTE Y SUR »

    http://www.filmaffinity.com/es/film747883.html

  62. Brock dice:

    Gentlemen,

    being American and not knowing the Spanish language so well I would like to respond in English to the topic set about Democracy in the CSA. Beg your pardon, dear readers.
    How could the Confederacy have been a democratic country when it allowed slavery? This is a fair question raised by Mr. Hernandez. On the one hand, the Confederate Constitution established a marvelously democratic government for its citizens, but on the other hand it allowed its citizens to own slaves if they wanted to do so (though most of Southern citizens were no slaveholders). Similarly, how could the United States of America have been a democratic country when it allowed slavery and when some New England states made huge profits from the overseas slave trade? This, too, is a fair question, isn´t it?. The U.S. Constitution was the most democratic document of its era for the citizens who lived under it, but that document also protected slavery, guaranteed the continuation of the overseas slave trade for twenty years, and mandated the return of runaway slaves. Most Northern states that abolished slavery did so very gradually, so gradually that slaves were held in New Jersey, Ohio and Rhode Island into the 1850s. And the so-called Negro-codes ensured even free men of color had no political or civil rights, interesting enough is the case of Illinois, Lincoln´s state. In the Southern states free men of color could vote and enjoy total freedom. When the «Civil War» began, there were over 400.000 slaves in Union states, and those slaves weren’t freed by Lincoln´s Proclamation of 1863.
    Nevertheless, willing to fairly judge the United States from 1789 to 1860 we may conclude that America, for all her faults, was the most democratic nation in the world at the time. I would say much the same thing about the Confederacy. Thank you.
    Brock Sommerauer, Atlanta, Georgia.

  63. Urogallo dice:

    La democracia no tiene que ver con la esclavitud, o negariamos la existencia de democracia en Grecia.

    Podemos decir que el ordenamiendo de los CSA no respetaba los derechos humanos, pero no que no estuviese organizado de un modo democrático.

  64. Koenig dice:

    Buenos días.

    A los efectos os dejo una traducción del texto publicado arriba por el Sr. Brock.

    «Caballeros
    Siendo americano y no conociendo el idioma español demasiado bien me gustaría contestar en inglés al tema planteado sobre la democracia en los Estados Confederados de América. Les ruego, estimados lectores, que me disculpen.
    ¿Cómo pudo ser la Confederación un país democrático si permitió la esclavitud? Es una interesante cuestión planteada por el Sr. Hernández. Por un lado, la Constitución confederada estableció un maravilloso gobierno democrático para sus ciudadanos, pero por el otro permitió a sus ciudadanos poseer esclavos si querían poseerlos (aunque la mayoría de los ciudadanos del sur no eran propietarios de esclavos). Similarmente ¿Cómo pudieron los Estados Unidos de América haber sido un país democrático cuando permitían la esclavitud y algunos Estados de Nueva Inglaterra obtuvieron grandes beneficios con el comercio ultramarino de esclavos? Esta también es una cuestión interesante ¿no es así?. La Constitución de los Estados Unidos fue el documento mas democrático de su era para los ciudadanos que vivieron bajo ella, pero ese documento también protegió la esclavitud, garantizó la continuación del tráfico ultramarino de esclavos durante veinte años, y ordenó la devolución de esclavos huidos. La mayoría de los Estados del norte que abolieron la esclavitud lo hicieron muy gradualmente, tan gradualmente que había esclavos en Nueva Jersey, Ohio y Rhode Island en la década de 1850. Y los llamados “Negro-codes” (códigos sobre negros) aseguraron que incluso los hombres de color libres no tuvieran derechos políticos o civiles. Bastante interesante es el caso de Illinois, el Estado de Lincoln. En los Estados del Sur los hombres de color libres podían votar y disfrutar de total libertad. Cuando comenzó la “Guerra Civil” había mas de 400.000 esclavos en los estados de la Unión, que no fueron liberados por la proclamación de Lincoln de 1863.
    A pesar de todo, juzgando con equidad a los Estados Unidos de 1789 a 1860 podemos concluir que América, a pesar de sus errores, era la nación mas democrática del mundo en ese momento. Diría mayoritariamente lo mismo de la confederación. Gracias
    Brock Sommerauer, Atlanta, Georgia”.

    (Por supuesto, los errores de traducción que puedan aparecer son míos)

    Saludos.

  65. Koenig dice:

    Buenas de nuevo.

    Y con respecto a la democracia. Se me ocurre que si nos atenemos a que democracia es aquello de gobierno del pueblo, habría que definir pueblo para saber si un Estado esclavista es o no democrático. Desde el momento en que dicho estado no considera a sus esclavos, o simplemente a quienes carecen de determinados derechos civiles, como parte del pueblo. Entonces puede ser un estado perfectamente democrático, desde la definición genérica de democracia y desde su propio punto de vista.

    Otra cosa, como bien dice Urogallo, es que dicho Estado no respete los derechos humanos, no sea justo… etc.

    Opino claro.

    Saludos.

  66. Urogallo dice:

    Estoy de acuerdo con Koenig: Los errores de traducción, de existir, son suyos.

  67. Koenig dice:

    Gracias, gracias.

  68. creo que las peleas lo unico que producen son muertes y desastres, yo en realidad me hago muchas preguntas como por ejp ¿por que existe la guerra? ¿por que no podemos llevar la fiesta en paz?. Pero seamos rrealistas en este pais y en todos los paises tiene que existir los conflictos y las revoluciones.Me parece lo mas terrible que niños que apenas estan empezando a vivir le acaben la vida de esta manera.

  69. Vorimir dice:

    Señores me gustaría leer algo introductorio al tema de la guerra de Secesión americana, de la que apenas se nada.

    El primer libro en el que pensé es éste. ¿Me vale?

    OJO, que busco ensayo, no novela. Quiero leer antes sobre el tema para despues meter mano a algunas novelas sobre el tema que habeis comentado y me han llamado mucho la atención.

  70. Koenig dice:

    Buenos días Vorimir.

    Por resumir y reasumir lo dicho en la reseña: el libro es un resumen típico basado en lugares comunes. Para alguien que no sepa nada del tema, yo lo recomendaría si se tiene interés en profundizar. Si no, junto al resumen, se cuelan, a mi humilde entender, datos que no son del todo correctos, aunque no muchos también es cierto, y tópicos. Con lo cual quien sólo tenga esta lectura se quedará con una visión incompleta de la totalidad del conflicto.

    Pero esta es solo mi opinión y como tal, no hay que tomarla demasiado en cuenta ;-)

    Saludos.

  71. chema dice:

    Hola Vorimir.

    Hace muchos años leí el libro de Isaac Asimov «Los Estados Unidos desde 1816 hasta la Guerra Civil» dentro de la Historia Universal Asimov en Alianza Editorial (bolsillo) que creo que aún lo puedes ver en librerías. Siendo como es una obra de divulgación, como la de Jesus Hernández, creo que te dará mas información sobre los antecedentes del conflicto. A mí me dejó un buen recuerdo.

    En cuanto a lo publicado recientemente, dentro ya del terreno del ensayo, «La batalla de Antietam» de James M. McPherson de RBA Coleccionables (de venta en quioscos o pidiendola a la editorial) es un buen camino para adentrarse en los primeros años de la guerra.

    Saludos.

  72. Ascanio dice:

    Pues puestos a barrer para casa, Vorimir, te recomiendo «1776» de David McCullough. Sólo habla de ese año en cuestión, pero fue fundamental en el desarrollo de la contienda. Aquí tienes la reseña:

    1776

    Saludos.

  73. mario dice:

    Hola, yo he leido el libro sobre la guerra de secesión de Jesús y la verda, me lo leí en 3 dias.Ha sido lo primero que he leido sobre el tema y me gustado mucho el libro. Supongo que tiene datos erróneos, ect..pero para hacerte una buena idea de la situación del pais y de la guerra está muy bien.Se lee muy ameno y hay veces que te metes dentro de la historia.Para mi muy recomendable, la verdad

  74. Urogallo dice:

    Te gano, lo he leido en 2 días.

    Ameno, sin duda, bien escrito, pero coincido en todo lo señalado por Koenig, y abundo en que la falta de mapas dificulta ( o imposibilita) la comprensión de las batallas. Lo mismo respecto al tema naval, y creo que habría sido interesante convertir los apendices finales en más páginas ( y eludir la larga introducción, para añadir, también, más páginas sobre la guerra).

    Y también coincido en que al menos es, por fin, una primera incursión en castellano sobre este tema.

  75. stonewall dice:

    Hola a todos. Acabo de terminar el libro y aunque veo que no se comenta nada desde unos meses, no quería pasar sin escribir unas líneas después de haber leído lo que aquí se expone.
    En principio decir que «Norte contra sur» me ha gustado bastante. No comparto la opinión de Koening sobre los: «grandes saltos adelante y atrás, lo cual hace perder de vista la relación que en su día tuvieron entre sí los sucesos acaecidos en diferentes lugares». En mi opinión el libro está bien estructurado cronológicamente, dentro claro está, de los dos escenarios principales del Este y el Oeste. En este sentido, y partiendo de mi condición de historiador, debería ver como obras de gran relevancia usadas por universidades contienen saltos constantes que hacen un verdadero suplicio el seguirlas.
    En cuanto a su otra crítica: “de mezclar obras de historia y de ficción, sin distinguir unas de otras”. Pienso que el autor simplemente trata de documentarnos sobre dichas obras, además ya comenta en cada una de ellas su posible rigor histórico e incluso el punto de vista con el que trata el conflicto, con lo que su crítica me parece exagerada en este aspecto.
    El único reproche a la obra a mi juicio es la ausencia de mapas, puesto que de los supuestos gazapos alegados por Ralph Anderson no ha concretado ninguno.
    Como complemento a futuras ediciones podría incluir el autor junto a las obras literarias y películas algunos juegos de estrategia para PC basados en el conflicto de gran rigor historíco como son: Ageod’s American Civil War y Take command second Manassas.
    Un saludo.

  76. Gentlemen: good to have found this discussion forum! I could obtain a copy of Mr. Hernandez´s book a couple of months ago and wanted to make a statement. Slavery was no more the cause of the war between the North and the South than taxation was the cause of the war between the colonies and Great Britain. Our forefathers were not so unwise as to impose upon themselves the heavy tax of a war with Great Britain merely to avoid the payment of the comparatively light tax which Great Britain desired to collect from them; and the men of the South were not so foolish as to incur the enormous loss which a war with the North would necessarily bring upon them to avoid the comparatively small loss to which they would be subjected by the nonenforcement of the fugitive slave law and the proposed prohibition of slavery in the territories. What drove the colonies to revolution was not the tax, but the British method of taxation, which violated their chartered rights, denied them political equality with other Englishmen, and menaced the cherished principle of self-government; and what drove the Southern States to secession was not the opposition to slavery, but the Northern method of opposing it, which violated their constitutional rights, denied their citizens equal privileges with the citizens of Northern States in the territories, and threatened such usurpation of power by the Federal government as would deprive them of independence and the right to regulate their own affairs. Not the tax, but the principle of government involved in the method of taxation, caused the revolution; and not slavery, but the principle of government involved in the proposed Northern way of dealing with it, caused secession. The question of taxation brought the deeper question of governmental principle to the front in the one case, and the question of slavery brought the deeper question of governmental principle to the front in the other case. About the risen discussion over Democracy in the US and the Confederacy, i just say: no comment, guys, they were miles away from you. Both.
    Thank you!

  77. Urogallo dice:

    Hombre, yo si querría comentar que si ha podido leer el libro de J.H en castellano bien podría contestar en el mismo idioma.

  78. Germánico dice:

    La aportación parece interesante, pero me da la impresión de que al hombre le han molestado nuestras opiniones. En fin, se ve que lo suyo no es la diplomacia.

  79. Koenig dice:

    Buenas noches.

    Yo mas bien lo que entiendo que no comparte es la afirmación -incluída en el libro- de que la esclavitud fue el motivo de la guerra.

    Tesis fantásticamente defendida por McPherson, por cierto.

    Saludos.

  80. libropensador dice:

    creo q el libro es una buena introduccion sobre esta guerra tan olvidada aqui en España, es un riesgo a escribir un libro mucho mas extenso teniendo pocos lectores sobre el conflicto, a mi particularmente me gustaria saber mucho mas sobre ello,concretamente alguna bibliografia sobre el general Lee y el general «muro de piedra «,tambien mas descripcion sobre las batallas .si conoceis algun libro sobre esto en español ,contestarme.gracias.

  81. Koenig dice:

    Buenas tardes librepensador.

    Así «a bote pronto» encontrarás algo sobre Jackson aquí.

    http://www.4shared.com/file/149134051/dba2058b/DeLaGuerra_Num_3.html

    y aquí.

    http://www.4shared.com/file/252953865/f015e43c/RevistaDelaGuerra_n4_R.html

    Un saludo.

  82. toni dice:

    Acabo de llegar a la reseña casualmente y comentar que el libro me pareció muy correcto como iniciación al tema.
    La narración es amena y me ha servido de motivación para conocer más sobre el tema así que mis ánimos al autor.(Con mucho retraso)

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